El sobrecalentamiento de un smartphone puede provocar una explosión. Foto: captura de pantalla.
Quemaduras, lesiones permanentes, emergencias letales y muertes. Esas son varias de las noticias que resuenan, cada cierto tiempo, tras la explosión de un smartphone o dispositivo móvil mientra su dueño lo cargaba. El lunes 3 de febrero de 2020, Catriel Gómez, un joven argentino resultó afectado gravemente mientras dormía en su casa cuando su celular explotó. El incendio de baterías ya se ha convertido en un tema de discusión frente a cómo el uso erróneo o maltrato de los artefactos pueden devenir en una tragedia.
Los dispositivos electrónicos de uso diario intenso, como un teléfono móvil, no son propensos generalmente a explotar en cualquier momento. Los productores de smartphones, por ejemplo, aplican sistemas de medidas de seguridad en los artículos para prevenir la sobrecarga. Pero hay dos problemas principales que podrían causarla: el comercio ilegal de recarga o, en su defecto, la fabricación de baterías defectuosas.
Para evitar una explosión, debe reconocer las señales de alarma y las razones más comunes por las que su dispositivo podría incendiarse.
Aunque es inusual que un teléfono celular explote, este incidente puede ocurrir porque estos aparatos trabajan con baterías recargables y, si en algún momento alcanzan altas temperaturas, esto puede generar una detonación.
De acuerdo con Nancy Jácome, especialista ecuatoriana en electrónica y control, la razón para que un celular explote es la sobrecarga de corriente en alguno de los circuitos. En realidad, las baterías contienen en su interior iones de litio, un material inflamable que aunque esté aislado por láminas, puede genera la explosión. Además, un fuerte golpe provocaría que las partículas se unan, hagan el cortocircuito y se genere el estallido.
La especialista indica que es riesgoso mantener el celular en el pecho porque, si este explota, podría provocar quemaduras en órganos vitales.
El celular del argentino Catriel Gómez explotó sobre su cuerpo mientras él dormía. Foto: Facebook/ Catriel Gómez.
“Me despertaron las llamas. Fui al baño, me tiré en la ducha y se me logró apagar. Y mi hermano logró apagar el fuego de la cama”, dijo Catriel Gómez. Otro de los motivos por los que puede estallar radica en las fallas de fabricación de la batería. Es lo que ocurrió a Samsung con algunos modelos del Galaxy Note7, smartphone que tuvo que ser retirado del mercado luego de varios reportes de que el dispositivo explotaba tras un sobrecalentamiento de las baterías.
Otro de los factores que contribuyen a deteriorar las baterías es el calor excesivo, que puede estar generado por una fuente externa (exposición al sol, por ejemplo) o durante el proceso de carga, como le ocurrió al joven cordobés.
Es importante que, durante el proceso de carga, el dispositivo no sea sometido a un uso prolongado, pues causa que el celular se sobrecaliente. Por ejemplo, en septiembre de 2019, una menor de 14 años de Kazajistán perdió la vida por la explosión de su teléfono móvil. La adolescente lo había puesto bajo su almohada mientras reproducía música y se cargaba.
Según Víctor Armijos, especialista de la empresa Omnisoft, hay que evitar que el celular quede conectado al cable del cargador por muchas horas. Además, al momento de dormir no hay que dejar el equipo cargando toda la noche porque una variación del voltaje puede generar una detonación.
También es importante tomar en cuenta que las baterías se vuelven inestables cuando superan los 50 grados centígrados, algo que puede suceder con más facilidad de lo que se cree. Si el teléfono empieza a sobrecalentarse, lo más recomendables es dejarlo descansar en ese momento. Las razones que pueden ocasionar un sobrecalentamiento son variadas: muchas aplicaciones abiertas, datos móviles o Wi-Fi encendido, uso de cargadores incorrectos o lugares de carga sin ventilación (dentro de una mochila o en el auto).