Hace tres años Jessenia Paredes dejó de utilizar papel, tiza y pizarrón para enseñar las clases de ciencias naturales a sus estudiantes de educación básica. Ahora utiliza a diario computador, pizarra digital e Internet para interactuar con sus alumnos.
Paredes trabaja hace cinco años en la Unidad Educativa del Milenio Sumak Yachanawasi (Casa del Saber), ubicada en Cotacachi, provincia de Imbabura. Allí, sus 25 alumnos poseen cada uno un computador e interactúan entre sí con las herramientas tecnológicas.
Los trabajos de colegiatura que presentan estos jóvenes ya no son en papel o cuadernos, ahora los realizan en programas como Power Point y Excel.
El tema de la tecnología en la educación volvió al debate con fuerza luego de que el Ministerio de Educación anunciara que se permitirá el uso de celulares en planteles educativos.
De hecho, el Ministerio prepara un reglamento para el uso de los teléfonos por parte de los chicos. Este documento estaría listo hasta antes del 5 de junio, cuando comiencen las clases en el régimen Costa.
En Quito, entre el martes y el miércoles también se analizó el tema Tendencias actuales del uso de la tecnología en los planteles educativos del país.
Con base en datos que conoce del INEC, la profesora Paredes sabe que el grupo que más utiliza la Internet tiene entre 16 y 24 años. Esto corresponde al 59% de la población.
Eso se refleja en el Colegio Sebastián de Benalcázar, de Quito. Octavio Calle, inspector general del plantel, manifiesta que los 1 400 alumnos de la institución tienen libre acceso a la Red y se les permite usar tabletas y teléfonos inteligentes para la investigación en clase.
Además, los 76 profesores de planta tienen una computadora personal para dictar clases.
Sin embargo, esto no sucede en todos los planteles educativos. Un estudio realizado por la generación interactiva en Ecuador, del Ministerio de Telecomunicaciones (Mintel) dice que en el país el 53% de profesores no utiliza Internet para explicar una materia.
Blanca Díaz es profesora de la Unidad Educativa Bicentenario Venceremos Uno, ubicado en el Beaterio, en el sur de Quito. Aunque en su escuela no todos los niños cuentan con un computador, ella trata de utilizar videos para enseñar lenguaje y comunicación.
A la maestra no le asusta la tecnología. En su escuela hay laboratorios de computación y sabe el manejo de aplicaciones de Internet para enseñar.
Espera que pronto, en cada aula, los estudiante puedan tener un computador individual para optimizar recursos y tiempo. Lo que sí tienen los chicos son celulares. El 57% de jóvenes de 10 a 18 años cuenta con un teléfono propio. Este dato consta en el estudio ‘La generación interactiva en Ecuador’, del Ministerio de Telecomunicaciones (Mintel).
Doménica Parada, gerenta de Programas de Acceso a Tecnología para Sistemas Educativos, de Microsoft en Latinoamérica, tiene 12 años de experiencia en educación y tecnología. En esta semana estuvo en Quito para participar de un taller sobre esta temática y dice que Chile es uno de los países que inició con un programa de uso de la tecnología en la educación. Lo hizo hace 20 años.
En ese país, uno de cada 10 estudiantes tiene un computador, se ha capacitado a los docentes para el uso pedagógico de las tecnologías y se ha trabajado en recursos didácticos digitales que sean adecuados al currículo nacional.
También se han generado modelos integrales de tecnología, para que desarrollen habilidades y competencias en los estudiantes. Se ha pasado del acceso a la tecnología a la formación docente y generación de recursos para hallar modelos pedagógicos con el uso de las tecnologías en el aula.
Según Parada, en este proceso ejecutado en Chile les ha costado más adaptarse al uso de tecnología a los docentes que a los estudiantes. Eso es normal -según la especialista- porque los niños nacen con tecnología.
En Ecuador, el Ministerio de Educación y la Corporación de Telecomunicaciones implementan el proyecto de generación de una comunidad de aprendizaje en línea. Esto se realiza mediante la aplicación de programas de formación en aspectos de la tecnología. Para esto se anunció la entrega de computadoras a 8 860 docentes del país, de 143 instituciones del Bachillerato Internacional.
En contexto
El martes se publicó un estudio del Centro Nacional de Investigaciones Científicas (CNRS). Allí se indica que la redacción de mensajes de texto (SMS) en el teléfono móvil, utilizando contracciones y alterando las palabras no empeora la ortografía de los adolescentes.