En el chequeo anual que Daniela hizo a su hija de 10 años en el 2021, el pediatra le recomendó que le colocara la vacuna contra la hepatitis A. Tras revisar el carné de vacunación, la especialista se dio cuenta que no tenía ninguna dosis.
La madre de familia recuerda que esa revisión fue en julio del año pasado, cuando Camila salió de vacaciones. “La pediatra me dijo que está al día con todas las vacunas, pero le faltaban las de la hepatitis y hasta ahora no he podido llevarla”, dice.
Por medio de noticias y redes sociales, Daniela se enteró de los casos de hepatitis aguda de origen desconocido que afecta principalmente a niños y decidió no postergar más y llevar a su hija para que le apliquen la vacuna.
El biológico contra la hepatitis A no forma parte del esquema regular de inmunización para infantes del Ministerio de Salud. Se la puede encontrar en centros privados y su costo oscila entre los USD 20 y 25.
La vacuna contra la hepatitis B, en cambio, si consta en el esquema regular y está dentro de la pentavalente (difteria, tosferina, tétanos, hepatitis B, neumonías y meningitis por haemophilus influenza tipo b). Esta se aplica a los dos, cuatro y seis meses de edad.
Adicionalmente se coloca una dosis en las primeras 24 horas del nacimiento al bebé que tiene madre con antecedente de la enfermedad.
Más demanda de la vacuna contra la hepatitis A
La enfermera Rosa León trabaja en Vacunamed, en Quito. Ella comenta que desde el jueves de la semana anterior hay más personas que acuden al lugar en busca de la vacuna contra la hepatitis A.
León señala que debido a que los padres trabajan de lunes a viernes, el sábado pasado hubo más afluencia y por eso extendieron el horario de atención hasta las 17:00.
En muchos casos, dice la enfermera, los niños solo tienen una vacuna y no culminaron el esquema de dos dosis, por lo que deben nuevamente empezar el proceso.
Xavier Almeida, jefe administrativo de Vacunorte, también indica que registran un incremento en la demanda de esta vacuna.
Esto se evidenció desde el miércoles 4 de mayo, sostiene Almeida, cuando por las noticias se conoció de los casos de hepatitis aguda de origen desconocido. Desde ese día y hasta el jueves 5, el stock que tenían se cerró.
Almeida menciona que el aumento se ha visto más en Quito que en otras sucursales que tiene la empresa como Ibarra, Portoviejo y Santo Domingo.
El costo de la vacuna contra la hepatitis A en estos centros privados es de USD 20 y USD 25.
Importancia de la vacuna
En su consulta, la pediatra Magaly Montalvo siempre recuerda a los padres que deben colocar la vacuna contra la hepatitis a sus hijos.
La especialista señala que la mayoría de ellos ya la tiene y no ha atendido casos de hepatitis A ni aguda.
Para Montalvo, si bien la dosis no está dentro del cuadro regular, es importante que se aplique el biológico a los niños para prevenir la enfermedad, especialmente en edad escolar.
“Es necesaria y más todavía si están en la guardería o la escuela. Ahí van a estar en contacto con otros niños y puede haber un riesgo de contagio”, dice.
La hepatitis A se puede contraer por consumir alimentos o beber agua contaminada por heces (materia fecal) que contiene el virus.
Por ello, además de la vacuna, Montalvo recomienda medidas de higiene como el lavado de manos, cubrirse la boca al toser o estornudar, lavar bien los alimentos y consumir agua hervida.