En una rueda de prensa, la subsecretaria de Anticorrupción, Dora Ordóñez, presentó algunos hallazgos encontrados en el hospital Foto: Valeria Heredia/El Comercio.
Con el objetivo de dar seguimiento a la investigación abierta sobre los procesos de contratación y adjudicación de insumos en el Hospital Pablo Arturo Suárez, de Quito, la subsecretaria de Anticorrupción, Dora Ordóñez, presentó algunos hallazgos encontrados en la casa de salud. Lo afirmó en una rueda de prensa, que se llevó a cabo este martes 3 de septiembre del 2019.
Existen –explicó– dos convenios en los que hallaron presuntas irregularidades con la empresa de Ormedic, entre noviembre de 2017 y abril del 2018. Estas habría sido autorizadas sin la documentación necesaria que establece la ley. Además, no hay evidencia o justificación que indique que se debían adquirir tal o cual insumo. “No cumplían con los requisitos”.
El primer contrato con la empresa es por un monto de USD 740 000. Además hay una deuda de USD 800 000. “Tampoco hay una justificación de que existan motivos para estos montos”, señala Ordóñez.
Es por ello que la Secretaría Anticorrupción enviará hoy, martes 3 de septiembre, los documentos para que se abra la investigación en la Fiscalía y en Contraloría, por un “posible delito de peculado y asociación ilícita”.
Otro de los hallazgos de la entidad es que habría un incumplimiento en las asistencias de 10 de los 17 médicos del área de traumatología, que suman los 680 días. “Solo se marcaban las entradas o las salidas” en el reloj biométrico. “Este incumplimiento afecta a los pacientes que buscan ser atendidos de forma oportuna”.
Por este motivo se envió un pedido al Ministerio de Salud, para que realice una investigación sobre los médicos que no cumplen su jornada laboral.
Pese a estos inconvenientes, Pedro Molina, director médico del Hospital, informó que esta casa de salud del norte de Quito, atiende con normalidad. “Estamos coordinando, para evitar cualquier desfase. Incluso, los procesos de contratación de insumos están en marcha”.
Sobre las denuncias de que existía una lista de espera larga para cirugías en el área de traumatología, Molina aclaró que en todos los hospitales ocurre eso, por lo que están trabajando para atender a todos los pacientes de forma oportuna.
Las investigaciones se abrieron tras una serie de denuncias realizadas en esta casa de salud, incluso la Secretaría Anticorrupción recibió una solicitud desde la Vicepresidencia de la República para que se investiguen los procesos de contratación en el área de traumatología, desde el 2012.
Antes, el entonces jefe de Traumatología, Juan Barriga, hizo públicos las supuestas dificultades que tenían los médicos de esa área del Pablo Arturo Suárez, para atender a sus pacientes. Por ejemplo, precisó, que faltaban suministros, lo que hacía imposible llevar adelante operaciones. Él, con apoyo de más médicos, dijo que había una larga lista de espera de ciudadanos, que requerían operaciones.