La EPOC o fibrosis pulmonar, causada por el tabaco, disminuye los mecanismos de defensa ante el virus; la OMS desmintió que la nicotina sea beneficiosa Foto: Pxhere.
Hace ocho días, al IESS Quito Sur llegó un paciente de 62 años, quien contó que por 30 años había fumado una cajetilla y media al día. La neumóloga del centro, Carina Coronel, explicó que el paciente ingresó al hospital centinela con altos requerimientos de oxígeno, fiebre y tos.
Tras los análisis le diagnosticaron coronavirus, pero también tenía fibrosis y enfisema, causada por el tabaco.
Los pacientes con enfermedades pulmonares -explica la médica- se acostumbran a la falta de aire. “La arquitectura del pulmón se destruye”.
El 70% de los pulmones del paciente estaba afectado. Por eso inició con covid-19 y se sobreinfectó con otras bacterias.
El tabaco causa enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). En Ecuador es la causa del 90% de casos de este mal y de fibrosis pulmonar.
En personas con factores de riesgo, los síntomas de covid-19 se extienden hasta por tres o cuatro semanas, anota la neumóloga del IESS.
El Ministerio de Salud advirtió que el consumo de tabaco, en cualquiera de sus formas, aumenta el riesgo de sufrir síntomas graves de covid-19.
La Cartera exhortó a dejar de fumar para mejorar la función pulmonar y cardiovascular de los consumidores y de las personas expuestas al humo.
Cuando una persona deja de fumar -precisa Coronel- los efectos inflamatorios desaparecen a las seis semanas, la función pulmonar se recupera entre dos y 12 semanas después. Y la tos y falta de aire, entre uno y nueve meses.
Alrededor del 5% de pacientes con covid-19 del Quito Sur es fumador. Son personas de más de 60. “Para que el pulmón se dañe -dice- se requieren años de exposición”.
Las historias clínicas de los pacientes positivos de covid-19 internados en el Pablo Arturo Suárez evidencian que el 50% ha sido fumador ocasional.
Los mayores de 50 son exfumadores. “La mortalidad o condiciones graves disminuyen cuando han dejado de fumar al menos 15 años atrás”, dice la neumóloga Belén Noboa.
El paciente fumador del Quito Sur tiene un índice tabáquico de +30. Según Noboa, eso se calcula al multiplicar el mayor número de cigarrillos consumidos en un día por el número de años con el hábito. Eso se divide para 20 (tabacos del paquete), “si es mayor a 10 es un fumador pesado”.
De alrededor de 300 pacientes que ha recibido el Hospital Metropolitano con síntomas respiratorios, 15 están internados. El único fallecido por covid-19 tenía 80 años y un daño pulmonar provocado por tabaco (enfisema), detalló César Delgado, jefe de Neumología.
El tabaco altera los mecanismos de defensa celular, explica Elizabeth Cajamarca, neumóloga del HCAM. Entre 10 células hay tres formadoras de moco, tres de defensa y cuatro evitan el colapso pulmonar.
Si se altera la estructura, ocho forman moco, una es de defensa y una evita que colapse el pulmón, dice Cajamarca, quien añade que en las personas fumadoras el covid-19 puede ser mortal en 18% de casos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Asociación Latinoamericana de Tórax advirtieron sobre este peligro. Señalaron que el tabaquismo es un factor de riesgo adicional para el contagio, ya que implica llevarse los dedos a la boca.
La OMS además desmintió la veracidad de estudios realizados en Francia y Canadá, sobre supuestos beneficios de la nicotina y del cannabis para combatir el SARS-CoV-2.
En estos se afirma que las sustancias se unen al mismo receptor del coronavirus, lo que impediría la infección.
Con 71 estudios de tabaco y covid-19, expertos concluyeron el mes pasado que no hay información debidamente validada, y reiteraron que fumar trae efectos negativos.
La neumóloga Noboa detalla que, según un estudio realizado en China, independientemente de la cantidad de tabacos, los fumadores tienen 1,4 veces más probabilidades de presentar síntomas graves, y 2,4 más de entrar a una unidad de cuidados intensivos.
En Ecuador, la meta hacia el 2025 es bajar a 5% la población de fumadores. Según Ensanut 2018, 4,3% de niños y adolescentes ya ha fumado.