Imagen referencial. La principal vía de transmisión de las infecciones respiratorias es el medioambiente. Foto: EFE
Tos, estornudos, resfriados, fiebre, gargantas congestionadas. Esos son algunos de las síntomas comunes que causan las enfermedades respiratorias durante la temporada de invierno.
Con la llegada de coronavirus Covid-19 a América Latina, especialistas de la salud recuerdan a la ciudadanía la importancia de prevenir estas infecciones no solo como una medida sanitaria pública, sino personal.
Ana María Gómez, docente de la Pontificia Universidad Católica de Ecuador, máster en Enfermedades Infecciosas y VIH y PhD(c) en en Biomedicina, bosqueja un grupo de medidas que se deben aplicar para evitar el contagio de enfermedades respiratorias como el resfriado común, la influenza, la faringitis, entre otras.
Para Gómez es importante conocer el alcance de las enfermedades respiratorias antes de aplicar un método preventivo. La especialista señala que no existen datos exactos de los tipos de virus circulantes que causan infecciones respiratorias altas a escala nacional, estas patologías tienen una tasa de prevalencia mundial del 20% y se reportan como un problema de salud pública a escala global. En Ecuador, la tasa de morbilidad de las infecciones es de 5,12 por cada 1 000 habitantes, de acuerdo con datos registrados por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censo, en el 2017.
La primera vía de contagio, dice Gómez, es el medioambiente en general. En ese sentido, la estrategia más efectiva es el lavado de manos, pues, de acuerdo con la especialista, ha demostrado una verdadera eficacia en el control de brote. El ajetreo cotidiano y el contacto diario con personas, transporte y decenas de objetos vuelven a un ser humano vulnerable.
Aunque no existe un protocolo de lavado en el día a día, Gómez recomienda la limpieza completa de las manos una vez cada cinco veces que entre en contacto con algún elemento externo. El lavado debe durar al menos 20 segundos con agua y jabón, especialmente después de ir al baño, antes de comer o después de sonarse la nariz, toser o estornudar.
El uso de un desinfectante antibacterial fortalece la asepsia pero tome en cuenta que debe tener un porcentaje mínimo de 60% de alcohol en adelante.
La segunda medida es evitar el contacto físico. Aunque es propio de la cultura latinoamericana el dar y recibir un saludo cordial como un beso en la mejilla o un cálido apretón de manos, Gómez recomienda no hacerlo. La distancia de seguridad para minimizar el riesgo de contagio, afirma la especialista, es de un metro.
Si usted se siente enfermo, tiene resfriado, tos o fiebre, el reposo domiciliario es la mejor opción. “Es importante que recuerden que mientras más contacto se produzca con una persona enferma, mayor será la transmisión”, enfatiza Gómez.
Por otro lado, si usted estornuda es esencial que lo haga dentro del ángulo de su codo para evitar la emisión de virales en cada episodio de tos.
Otra medida clave -anota Gómez- es la limpieza de superficies que se debería realizar con frecuencia con objetos y áreas de uso cotidiano. Lo puede hacer utilizando un producto común de limpieza en rociador o toallita con alcohol o solución de clorhexidina.
El uso de las mascarillas también es importante. De acuerdo con las recomendaciones de los Centros de Prevención y Control de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés), no deben ser usadas por quienes no estén enfermos. Las personas que presentan síntomas del coronavirus deberían utilizarlas, en cambio, para ayudar a prevenir la propagación de la enfermedad a los demás. El uso de mascarillas es también esencial para los trabajadores de la salud.