Médicos del Hospital Eugenio Espejo protestaron por la falta de medicinas e insumos

Los médicos de ese establecimiento protestaron por la falta de medicinas e insumos para los pacientes que se atienden allí en 35 especialidades. Foto: Captura de pantalla

Un plantón se realizó a las 12:00 de hoy, martes 8 de junio del 2021, en la puerta principal del Hospital Eugenio Espejo, ubicado en la avenida Gran Colombia, del centro de Quito. Los médicos de ese establecimiento protestaron por la falta de medicinas e insumos para los pacientes que se atienden allí en 35 especialidades.

Tal como ocurrió ayer, 7 de junio, con los galenos del Hospital Carlos Andrade Marín del IESS, los manifestantes salieron a la calle con pancartas. “Solicitamos al Gobierno que nos escuche ya que corremos mucho riesgo al atender a los usuarios sin los insumos necesarios”, manifestó Mercedes Almagro, presidenta de la Asociación de Médicos del Hospital Eugenio Espejo

Acotó que no hay relajantes, antibióticos, analgésicos, antisépticos, gasas, entre otros. “Se ha informado a las autoridades que no hacemos cirugías programadas, solamente de emergencia. En el área de emergencias no hay cristaloides y líquidos para la hidratación y reanimación de pacientes”. Solicitó al Gobierno que incremente el presupuesto a USD 57 millones anuales para que el Eugenio Espejo opere como un centro asistencial moderno de tercer nivel. 

Cuestionó que en los últimos años ha funcionado con un déficit de USD 18 millones y “tapando huecos”. La situación es tan crítica -acotó la dirigente- que no hay relajantes musculares para los pacientes que contrajeron covid-19. 

Los manifestantes pidieron estabilidad de las autoridades ya que el año pasado hubo cinco gerentes y siete directores médicos. Consideran que esa falta de planificación administrativa no permite que se realicen procesos adecuados en la adquisición de insumos y medicinas.

Luis Rivas es vicepresidente Asociación de Médicos del Eugenio Espejo. Dijo que ni siquiera hay hilos de suturas para las operaciones. A su criterio, la falla radica en que se nombra a gerentes que son cuota política y no se toma en cuenta a los galenos ecuatorianos. Además, los equipos tecnológicos ya se encuentran obsoletos