La mañana del miércoles 10 de junio del 2020 hubo un plantón en la plaza San Francisco, en el centro Guayaquil. Foto: Enrique Pesantes / EL COMERCIO
El féretro aún aguarda en la sala de su casa. La madre de Soraya Díaz presentó los primeros síntomas de covid-19 el 25 de marzo; no podía respirar. Ese día acudieron al Hospital General Guasmo Sur, en Guayaquil, pero no recibieron atención. La familia entonces recurrió a una clínica privada donde falleció.
“Fuimos a la clínica con el féretro pero dijeron que no nos entregarían el cuerpo porque el Gobierno había ordenado que sean cremados. Después la llevaron al hospital del Guasmo, donde mi hermano hizo el trámite y hasta ahora estamos esperando”, relata Soraya, intentando no llorar.
Ella es parte de las 38 familias incluidas en una acción de protección, presentada por la Defensoría del Pueblo en Guayas debido el extravío de cuerpos durante la emergencia sanitaria por covid-19. La audiencia estaba programada para las 14:00 de este miércoles 10 de junio de 2020, pero fue suspendida.
La vicedefensora, Zaida Rovira, explicó que el juez de la Unidad Civil de Guayaquil, Carlos Andrade, no notificó a uno de los hospitales demandados. “Esperamos que la audiencia sea convocada hasta el martes de la próxima semana para dar tranquilidad a los familiares”.
Esta mañana hubo un plantón en la plaza San Francisco, en el centro de la ciudad. Llegaron con carteles y fotografías, vestidos de luto para recordar a sus seres queridos y exigir la entrega de sus cuerpos. ‘No jueguen más con nuestro sufrimiento’, se leía en uno de los letreros.
“Lo que quieren los familiares es que se pare con esta violencia a su integridad física, psicológica y emocional”, dijo Mirelli Icaza, delegada de la Defensoría del Pueblo en Guayas. “Hay personas que no pueden dormir porque todo el tiempo sueñan con sus familiares y les dicen que los busquen”.
Mabel Villegas tampoco ha podido sepultar a su madre. La última vez que la vio fue el 30 de marzo; ese día murió en el Hospital del Guasmo Sur. “Dijeron que nos iban a llamar para entregarnos el cuerpo. Ya han pasado dos meses y aún no la encontramos. Es desesperante no poder darle el último adiós”.
Rovira agrega que han solicitado información al Ministerio de Salud Pública sobre los protocolos aplicados, pero no han tenido respuesta. Esta tarde tenían previsto pedir que el juez declare una sentencia con efecto interpares. “Es decir, que no solo cobije a las 38 personas sino a todos quienes aún no reciben los cuerpos de sus familiares fallecidos”.
El Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos se contactó con 368 personas que reportaron haber perdido un familiar durante la emergencia sanitaria, específicamente en Guayaquil, entre fines de marzo e inicios de abril. Ese fue el pico de la pandemia por covid-19, cuando los sistemas de salud y funerarios colapsaron.
Un informe preliminar del comité revela que 76 cuerpos siguen extraviados; 25 fallecieron en hospitales públicos y privados, mientras que 51 murieron en sus hogares.
El lunes este organismo presentó un recurso de amicus curiae para intervenir en la audiencia pública ante “la vulneración del derecho a la dignidad humana, integridad personal, derecho constitucional a recibir servicios públicos de óptima calidad y seguridad jurídica”.
Soraya acudió a la Defensoría en busca de respuestas. En el auditorio de la entidad en Guayaquil se colocaron sillas, de forma distanciada, para seguir la audiencia de manera virtual, pero no se realizó.
En casa esperan poder reunirse, llorar a su madre y darle sepultura. “Hemos visto en las redes sociales cómo estaban los cuerpos en esos contenedores. Estuvimos casi un mes afuera del hospital con el féretro… Exigimos a las autoridades que nos den el cuerpo de nuestra madre”.