Especial de:
Atención enemigos de las multitudes, obsesivos del uso eficiente del tiempo: el Mundial de Fútbol les ofrece una oportunidad única.
Que el país se pare por un partido de fútbol, ¿los irrita? Aprovéchenlo a su favor.
Estas son 5 actividades que conviene hacer mientras el resto de los argentinos está hipnotizado frente al televisor.
1. Ir al supermercado.
Durante los partidos de la Selección, en el estacionamiento abundan los lugares libres, perfecto para los que tiemblan cada vez que deben “encajar” el auto casi pegado a una columna.
Además, las góndolas están desiertas, así que es buen momento para pasear con total tranquilidad, sin limitarse a 15 unidades para hacer la fila rápida y sin hacer cálculos rebuscados para adivinar qué cajera avanza con más prisa.
2. Moverse en la Ciudad vacía.
El trayecto desde el Obelisco hasta zona norte, por ejemplo, que representa una hora y media de viaje en una jornada laboral típica, puede cubrirse en media hora durante un partido por más que sea lunes, miércoles o viernes.
He llegado a viajar solo en un vagón del subte de la línea B en hora pico
Eso sí: hay que evitar salir durante el entretiempo, cuando muchos “se mudan” de casa o bar para ver los restantes 45 minutos.
Incluso usar el transporte público es una panacea. “He llegado a viajar solo en un vagón del subte de la línea B durante un partido, y era hora pico, cuando lo habitual es empujar para poder entrar”, cuenta Leandro, que trabaja en el microcentro y vive en el barrio de Almagro.
3.Gimnasio para uno.
Claudia García está analizando seriamente aprovechar los partidos de la Argentina para ir al gimnasio: sabe que no hará falta esperar a que se desocupen las máquinas más requeridas. La clase de aeróbics que suele reunir a más de 20 chicas frente al espejo se vuelve casi particular; la profesora es la personal trainer (por un precio mucho más conveniente, claro).
4.Shopping sin estrés.
El vendedor de un local de un centro comercial de Martínez confirma que, mientras juega la Argentina, el lugar se llena de mujeres que ignoran por completo el fenómeno mundialista.
Los empleados del lugar me odiaron, pero el trámite fue en tiempo récord
Más allá de la ventaja de tomarse ese rato para comprar sin apuro (y sin límite), un buen programa es internarse en el cine del shopping y experimentar esa deliciosa sensación de una sala a oscuras, vacía, más grande que nunca y solo para uno. Como ver un DVD en la soledad del hogar, pero mil veces mejor.
5. Trámite tedioso en tiempo récord.
Se trata de una alternativa más aburrida, pero no menos efectiva. Vanesa Cisilino cuenta que durante un partido de la Argentina fue a la Anses a hacer un trámite que tenía pendiente desde hacía meses.
“Un día cualquiera, hubiera hecho una cola eterna y demorado horas. En cambio, ese día, demoré sólo 10 minutos, literal. Los empleados del lugar me odiaron, obviamente, pero fue en tiempo récord”, recuerda.