En un mes, Ecuador podría sumarse a países como Colombia, España, Francia e Italia, en donde el uso de la mascarilla en espacios abiertos dejó de ser obligatorio.
El presidente del Comité de Operaciones de Emergencia (COE) Nacional, Juan Zapata, aseguró en el informe del pasado 1 de abril que el tema será analizado el próximo 3 de mayo, 15 días después del feriado de Semana Santa.
El funcionario dijo que los indicadores sanitarios sobre la pandemia en el país son los mejores de la región y si bien la positividad llegó al 5% (una cifra esperada para relajar esa medida), en el feriado hay procesiones multitudinarias por lo que se acogió una sugerencia del Ministerio de Salud para evaluarla posteriormente.
De su parte, la ministra de Salud, Ximena Garzón, manifestó que confían que el 5% de positividad viral siga disminuyendo en las siguientes semanas. Además, mencionó que se está alcanzando los niveles de agosto y septiembre de 2021, cuando ese indicador se ubicó en 4,7%.
La presencia del sublinaje BA.2 de Ómicron tampoco es una preocupación para las autoridades sanitarias. La titular de la Cartera de Estado dijo que se han detectado ocho casos en el país. Sin embargo, no se ha evidenciado un cambio en el comportamiento epidemiológico y los indicadores siguen a la baja.
“Aunque es más contagiosa, al igual que en otros países no se ven cambios de tendencia en Ecuador. No tenemos que preocuparnos por este sublinaje mientras los indicadores sigan tan positivos”, sostuvo Garzón.
Asimismo, la funcionaria hizo un llamado para que la población se siga vacunando contra el covid-19. También anunció que el segundo refuerzo o cuarta dosis ya se aplica en el país para las personas mayores de 50 años.
Retomar cierta normalidad
El epidemiólogo de la Universidad Internacional del Ecuador, Marco Fornasini, considera una medida cautelosa esperar a que pase el feriado de Semana Santa para tomar una decisión sobre el uso de la mascarilla en espacios abiertos.
Para el especialista, es necesario ver el comportamiento del virus y su evolución. Al parecer, dice, ya existe cierta inmunidad grupal porque las infecciones son bajas, la tasa de positividad ha decrecido al igual que la mortalidad por la enfermedad.
De acuerdo con los informes del Ministerio de Salud, durante tres días consecutivos (19 al 21 de marzo) no se registraron fallecidos por covid-19 y en la semana epidemiológica 12 se reportaron dos decesos.
En ese contexto, las muertes en exceso presentan una disminución. Entre marzo y abril de 2020 hubo 254% exceso de mortalidad, mientras que ahora es del 10,2%. “Casi a niveles prepandémicos, pese a que tenemos Ómicron”, aseguró Garzón.
Para Fornasini, tras dos años de pandemia es necesario ir retomando cierta normalidad y un paso sería dejar la mascarilla en espacios abiertos. Sin embargo, su uso en lugares cerrados se debe mantener.
El epidemiólogo sostiene que el riesgo de contagio en un espacio abierto es menor, siempre y cuando se mantenga una distancia de al menos 1,5 metros.
Disminuir el riesgo
El investigador de la Universidad San Francisco de Quito, Paúl Cárdenas, coincide en que el cubrebocas se debe seguir utilizando, sobre todo, en espacios cerrados o abiertos si es que hay muchas personas.
El especialista explica que, por ejemplo, en un estadio o concierto, en donde la gente grita o canta, la posibilidad de infectarse se incrementa. Por ello dice que lo más adecuado es protegerse con la mascarilla, así el evento sea en un lugar abierto.
Además, Cárdenas resalta la importancia de que la población complete el esquema de vacunación con la tercera dosis para estar más seguros. “El país tiene un buen porcentaje de inmunización con la segunda vacuna, pero en la tercera bordeamos el 30%. Tenemos niveles muy bajos”, concluye.