1,8 millones de estudiantes empezaron el nuevo ciclo escolar en en Sierra y Amazonía. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO
En la segunda semana del ciclo escolar 2020-2021, los estudiantes del régimen Sierra-Amazonía se habitúan a su nueva rutina virtual. Esta incluye recesos cortos y largos, en medio del tiempo que los chicos permanecen en pantalla, desde el martes 1 de septiembre del 2020.
En una institución particular de Quito, las hijas de 8 y 13 años de María Eugenia Garcés tienen 20 minutos de receso entre cada clase de 40 minutos del día. En cuanto llega ese tiempo libre -cuenta la madre de familia- su hija más pequeña sale corriendo al jardín. Ahí juega con los perros y pasea en bicicleta.
La estudiante de noveno de básica, en cambio, “es más sedentaria, ella camina un rato, come y se va al celular”, cuenta María Eugenia. “Ya están acostumbradas, no es tan caótico. Los profesores tratan de hacer las clases amenas. Les hacen que se paren, que canten, que bailen, que pinten, planifican clases lúdicas y los grupos son de 14 niños”.
En primero de básica de otro plantel particular de Quito, Cristhian tiene recreo entre las 10:00 y 10:30, en un horario de clases virtuales desde las 08:20 hasta las 12:45. En ese lapso -cuenta su tío, Marco R.- el niño apaga su cámara, come frutas, juega con sus juguetes y cinco minutos antes de la clase se lava las manos y se vuelve a ubicar en su escritorio.
Sebastián, en cambio, tiene 10 minutos libres dos o tres veces en la jornada virtual diaria de su institución educativa fiscomisional. En ese tiempo, sus maestros de primero de bachillerato le recomiendan que estire las piernas, que vaya al baño, tome agua o coma algo.
1,8 millones de estudiantes empezaron el nuevo ciclo escolar en en Sierra y Amazonía. 1,3 millones estudian desde casa en planteles fiscales y 295 465, en instituciones particulares.