Con un plantón en la Plaza Grande, en el Centro Histórico de Quito, se celebró el 4:20, conocido como el ‘día de la hierba’ o el Día Internacional de la Marihuana.
Gabriel Buitrón, presidente de Ecuador Cannábico, comenta que 4:20 hace referencia a la hora en que unos jóvenes estudiantes de California, Estados Unidos, conocidos como Waldos, después de terminar su jornada escolar, fumaban cannabis debajo de la estatua de Louis Pasteur. Esto ocurrió en los años setenta.
Así, el 4:20 se convirtió en un código que con el pasar del tiempo se extendió por el mundo y se adoptó el 20 de abril como el Día Internacional de la Marihuana.
Buitrón señala que con el paso de los años la prohibición a esta sustancia se ha mantenido y las personas dentro de la cultura cannábica también se han acostumbrado a manejar ciertos códigos como el 4:20.
Entre las actividades que se realizaron por este día está el plantón frente al Municipio de Quito al que asistieron aproximadamente 200 personas. Este fue convocado por los organizadores de la Marcha Mundial de la Marihuana, que tiene lugar cada 5 de mayo.
Pedido al Municipio
Buitrón comenta que se entregó un documento con diversos pedidos a la Alcaldía, entre los que se solicita que se regule el espacio público para los usuarios de cannabis y se les diga en dónde se puede o no consumir.
“Eso es parte del esfuerzo del movimiento por encontrar acuerdos que no sean violatorios ni atentatorios de los derechos humanos, ni a los derechos que tenemos en la Constitución como el derecho al espacio público”, dice Buitrón.
En la movilización del próximo 5 de mayo se dirigirán al Municipio para exigir una respuesta a este pedido.
Carlos Barriga, asistió al plantón del 20 de abril. Comenta que no consume marihuana, pero apoya su legalización y la no criminalización a sus usuarios. “A muchas personas les meten a la cárcel por consumir, no son vendedores ni expendedores”, dice.
Señala también que alrededor del cannabis y de quienes la usan hay mucho estigma. “Piensan que son delincuentes, que no hacen nada de la vida. Yo conozco a profesionales, padres, gente exitosa y responsable que consume”, agrega.