Una vacuna experimental de Glaxo Smith & Kline redujo a la mitad el riesgo de niños africanos de contraer malaria, lo que posiblemente la convertirá en la primera inmunización disponible en el mundo contra la letal enfermedad.
La vacuna brindó protección contra la malaria clínica y severa a niños de entre 5 y 17 meses de vida en África, donde la condición transmitida por mosquitos causa la muerte de cientos de miles de infantes cada año, según los datos de la etapa final del ensayo clínico amplio difundidos este martes.
La investigación la dirigió Joe Cohen, quien ha trabajado 24 años en la búsqueda de un tratamiento que erradique la enfermedad.
“Esta información nos acerca a tener la primera vacuna contra la malaria en el mundo”, dijo Andrew Witty, presidente ejecutivo del laboratorio británico que desarrolló la vacuna junto con la entidad benéfica denominada Iniciativa PATH para una Vacuna contra la Malaria.
Complementa lucha
Si bien marca un logro sin precedentes en la lucha contra la enfermedad, se estima que la vacuna -denominada RTS,S o Mosquirix- no es una solución rápida para la erradicación de la malaria.
“Creo que esto va a contribuir al control de la malaria más que a su erradicación”, dijo Tsiri Agbenyega, investigador en los ensayos de la RTS,S en Ghana, en una conferencia en Seattle sobre la enfermedad.
“Probablemente no lo logramos aún, pero éste es un avance científico realmente importante”, dijo Peter Agre, director del Instituto de Investigación en Malaria de John Hopkins y antiguo ganador del Premio Nobel.
Los expertos señalan que una vacuna efectiva es clave para completar la lucha contra la enfermedad, que se realiza con mosquiteros tratados con insecticidas, aerosoles y uso combinado de fármacos contra la malaria, que ayudaron a reducir ampliamente la cantidad de casos y muertes por malaria en los últimos años.
Los nuevos datos fueron presentados en la conferencia del Foro de la Malaria de la Fundación Bill & Melinda Gates, en Seattle, y publicados simultáneamente en ‘New England Journal of Medicine’, y fueron los primeros de un ensayo clínico de Fase III realizado en 11 instalaciones de siete países de África subsahariana.
Luego de 12 meses de seguimiento, se comprobó que tres dosis de RTS,S disminuyeron un 56% y un 47%, respectivamente, el riesgo de experimentar malaria clínica y malaria severa
Los resultados sobre bebés de entre 6 y 12 semanas de vida se esperan para dentro de un año y, si todo va bien, GSK cree que la vacuna podría llegar al mercado en el 2015.
La malaria es endémica en más de 100 países de todo el mundo y causó la muerte de unas 781.000 personas en el 2009, según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Es causada por un parásito transportado en la saliva de los mosquitos.
La vacuna RTS,S está diseñada para actuar cuando el parásito ingresa en el torrente sanguíneo del paciente, luego de la picadura del mosquito. Al estimular una respuesta inmune, puede evitar que el parásito madure y se multiplique en el hígado.
Sin esa respuesta inmune, el parásito vuelve al torrente sanguíneo e infecta los glóbulos rojos, provocando fiebre, dolor corporal y, en algunos casos, la muerte.