La microbiota intestinal es un ecosistema complejo y vital para nuestra salud. A continuación, te presentamos once sugerencias médicas para entender mejor su importancia, cómo mantener su equilibrio y las opciones de tratamiento:
- Comprende qué es la microbiota intestinal: La microbiota está compuesta por trillones de microorganismos, tanto benignos como malignos, que habitan en nuestro intestino y cumplen funciones esenciales para el organismo.
- Identifica los síntomas del desequilibrio: Un desequilibrio en la microbiota puede manifestarse con síntomas como dolor abdominal, distensión, gases, diarrea y estreñimiento. Conocer estos signos es crucial para buscar ayuda médica a tiempo.
- Conoce el eje intestino-cerebro: Estudios recientes han demostrado la conexión entre el intestino y el cerebro. Un desequilibrio en la microbiota puede influir en nuestras emociones y provocar trastornos como ansiedad y depresión.
- Evita los malos hábitos alimenticios: Consumir alimentos ultraprocesados, con alto contenido de azúcares y grasas trans, afecta negativamente la microbiota. Opta por una dieta equilibrada rica en frutas, verduras, y cereales integrales.
- Limita el uso indiscriminado de antibióticos: Los antibióticos no solo eliminan bacterias malas, sino también las buenas. Evita la automedicación y consulta a un especialista antes de tomar cualquier medicamento.
- Incluye probióticos en tu dieta: Los probióticos son microorganismos vivos que benefician nuestra salud intestinal. Se pueden encontrar en alimentos como el yogur y en suplementos. Consulta con un profesional de la salud para elegir el adecuado para ti.
- No olvides los prebióticos: Los prebióticos son sustancias que promueven el crecimiento de bacterias beneficiosas en el intestino. Alimentos ricos en fibra, como los cereales integrales y la quinoa, son excelentes fuentes de prebióticos.
- Controla el estrés: El estrés crónico puede afectar negativamente la microbiota. Practica técnicas de relajación como el yoga y la meditación para mantener un equilibrio emocional y, por ende, intestinal.
- Fomenta hábitos saludables desde el nacimiento: El parto vaginal y la lactancia materna favorecen la colonización de bacterias beneficiosas en el intestino del recién nacido, promoviendo una microbiota saludable desde el inicio de la vida.
- Realiza ejercicio regularmente: La actividad física regular no solo mejora la salud general, sino que también contribuye al equilibrio de la microbiota intestinal.
- Consulta a un especialista: Si presentas síntomas persistentes relacionados con el intestino, es fundamental acudir a un gastroenterólogo. Ellos pueden realizar diagnósticos precisos y recomendar tratamientos específicos para cada caso.
Escucha nuestro podcast para conocer más del tema
La gastroenteróloga Yajaira Villamarín aborda en detalle este tema en un diálogo con Oscar Álvarez.
Mantener una microbiota intestinal equilibrada es esencial para nuestra salud integral. Adopta estos hábitos y recomendaciones para asegurar el bienestar de tu intestino y, en consecuencia, de todo tu organismo. Recuerda siempre consultar a un especialista.
Este artículo forma parte de ‘El Cuaderno de la Salud‘ de EL COMERCIO. Si tienes consultas o sugerencias, llena el formulario a continuación. Mantente informado y cuida tu salud.