El efecto de la flibanserina, o ‘viagra rosa’, depende de causas emocionales
El addyi es la primera píldora creada para incrementar el deseo sexual en las mujeres.
Finalmente, después de haber sido rechazada en dos ocasiones (en el 2010 y en el 2013), el próximo 17 de octubre saldrá a la venta la flibanserina, el equivalente al viagra que usan los varones.
La Food and Drug Administration (FDA) dio el visto bueno el pasado 18 de agosto. Inicialmente se comercializará en Estados Unidos bajo prescripción médica. Se toma esa medida de precaución porque al mezclarse con el alcohol podría tener algunos riesgos.
El medicamento está creado para mujeres que están en la etapa de la premenopausia (alrededor de los 36 años), y en particular, para aquellas que sufren del llamado desorden del deseo sexual hipoactivo generalizado (TDSH).
“El TDSH se caracteriza por un bajo deseo sexual que causa una angustia o dificultades interpersonales considerables y no se debe a una enfermedad médica o psiquiátrica coexistente, problemas dentro de la relación ni a los efectos de un medicamento u otro fármaco”. Así es como lo explica la FDA en su página web oficial.
La flibanserina se presenta en una pastilla rosada, cuyo nombre comercial es addyi y que influye en el sistema nervioso. Según el ginecólogo Juan Carlos Paz, de la Clínica del Bosque, esta actúa sobre las sustancias químicas del cerebro que regulan el estado de ánimo y apetito, tal como lo hacen los antidepresivos.
Se supone que este medicamento aumenta la dopamina, sustancia producida por el cerebro y que se relaciona con el apetito; y que reduce la serotonina, relacionada con la sensación de saciedad.
Paz añade que aunque al medicamento se lo promociona como la solución para aumentar el deseo sexual, no hay estudios que avalen aquello. “Lo que sí ha hecho es prolongar las relaciones sexuales. Habrá que esperar para ver los efectos reales de esa medicación”.
Aunque aquello fuera cierto, Sonia Gómez, ginecóloga, asegura que la pastilla carece de un efecto milagroso. Sin embargo, dice, podría funcionar siempre que en la pareja exista química, amor, respeto...
La flibanserina fue aprobada después de realizar un estudio, que consistió en tres ensayos. “Alrededor de un 10% más de pacientes tratados con addyi que los pacientes tratados con placebo reportaron mejorías significativas en los eventos sexuales satisfactorios, el deseo sexual o la angustia.
No se ha demostrado que addyi mejore el rendimiento sexual”, apunta el estudio. La eficacia de ese medicamento fue evaluada en 2 400 mujeres premenopáusicas, de 36 años, en 24 semanas.
“Si ya no le gusta estar con su esposo en la intimidad, si no le gusta que la acaricie… estamos hablando de otra cosa. Se podría tratar de un trastorno y podría necesitar de ayuda psicológica”, explica Gómez. A diferencia del viagra masculino, que después de tomarlo produce la erección del pene, “la mujer no reacciona con el addyi después de haber sufrido un engaño o cuando se terminó el amor de pareja”.
Según ella, el viagra tiene un efecto físico inmediato y en el caso de los varones, en muchas de sus relaciones no intervienen los sentimientos. Sobre ese tema, Juan Carlos Paz dice que “aunque tomes viagra es indispensable que exista química para que se provoque la erección”.
Otra de las diferencias entre ambos productos es que al viagra se lo puede tomar hasta 30 minutos antes de mantener una relación sexual, mientras que la flibanserina se la debe ingerir cada noche, de forma indefinida o hasta que llegue la menopausia (que es el cese de la menstruación) y que por lo regular llega a los 50 años.
Entre los efectos secundarios están los mareos, vómitos, presión baja, desmayos… Este medicamento también está restringido a personas que usan anticonceptivos, quienes podrían sentir mayor incomodidad como efecto secundario.
En contexto
Sprout Pharmaceuticals comercializará este medicamento (nombrado addyi), que aumenta los niveles de dopamina y la norepinefrina y disminuye los de serotonina en el cerebro, lo cual elevaría la libido de las mujeres.
