La capital de Cañar pretende dotar de renovadas
ofertas para sus ciudadanos y los visitantes.
Con el fin de diversificar los atractivos nocturnos en Azogues, la Gobernación de Cañar en coordinación con la Dirección Zonal 6 del Ministerio de Turismo diseñaron una ruta gastronómica que fue parte de la agenda festiva por los 193 años de cantonización de Azogues.
Según María Rosa Aguirre, de la dirección de promoción de la Zona 6 del MinTur, el proyecto surgió para darles más atractivos a los turistas y azogueños durante las noches. “Fue la ocasión ideal para crear un abanico de oportunidades en una ciudad que parecía que dormía a partir de las 17:30”.
El proyecto se desarrolla en la calle Simón Bolívar con la participación de cinco establecimientos: Con-tra-dicción, Tonic Lounge&K-fe, La Golosina de Antaño, Fiore Gelato y Kuritambo Cervecería.
Uno de los platos de mayor oferta es la Ensalada cañari, cuyo ingrediente especial es la sal marina en grano mezclada con la pepa de sambo como aderezo. A ese plato se lo acompaña con un cebiche andino con caviar de trucha y un locro ahumado con bombón de quesillo.
Otro platillo con gran aceptación en su estreno fue la Fritada peleusí, que es una especie de llapingacho, pero acolchado con la tradicional cascarita del sur del país, más fina y crujiente, además de hojas frutales y perfume de ají.
Aguirre recomendó experimentar con las croquetas de cangrejo en arroz salteado, acompañadas de una yaquisaba de lomo fino, junto al complemento del postre veneciano.
En Kuritambo Cervecería, en cambio, sus creaciones fueron inspiradas en los dioses de la cultura cañari, como el sol y la luna. A sus bebidas las bautizaron como Killa stout, que es una cerveza negra y se refiere a la luna, mientras que Inti weissbier es una cerveza rubia y se relaciona con el sol.
Hay precios para todos los bolsillos. En promedio se puede gastar USD 12 en un menú que incluye entrada, plato fuerte, bebida y postre.