Imagen referencial. Entre los cambios que se incluyeron en este artículo está que la música ecuatoriana transmitida por radios locales deberá difundirse en horarios de alta recepción, de acuerdo con la regulación que emite el Cordicom. Foto: Pixabay
El pasado mayo, 24 horas antes de finalizar su mandato, el expresidente Rafael Correa aprobó una reforma al artículo 75 del Reglamento General de la Ley Orgánica de Cultura, en el que se regula la difusión de los contenidos musicales que se producen en el país. Esta nueva disposición entrará en vigencia este martes 20 de junio de 2017.
Entre los cambios que se incluyeron en este artículo está que la música ecuatoriana transmitida por radios locales deberá difundirse en horarios de alta recepción, de acuerdo con la regulación que emite el Consejo de Regulación y Desarrollo de la Información y Comunicación (Cordicom). Los radiodifusiores y artistas locales se han manifestado al respecto.
Karla Sánchez, locutora dela emisora La Metro, opina que esta reforma ha afectado de forma negativa a los contenidos de la radio, ya que esta ha sido reconocida por los ecuatorianos como una radio de rock y, al imponer la ley, la emisora ha perdido su identidad. “La misma ley te obliga a que ayudes al artista independiente, pero te censura al mismo tiempo: nosotros, como radio de rock, quisiéramos poner, por ejemplo, Muscaria, pero por ser música muy pesada la ley te restringe y no puedes ponerla en horario familiar”.
En este sentido, Sánchez comenta que La Metro ha tenido que optar por poner géneros más apegados al pop o al punk, cuyos contenidos no son restringidos en los horarios familiares, y esto ha causado que “la gente nos critique, dice que La Metro ya no es lo que era”.
El investigador musical y gestor cultural Hernán Guerrero tilda a esta ley, conocida como la ley del 1×1, como “nefasta”. Considera que es injusto que una ley exija qué tipo de música debe sonar en una radio.
“Soy productor, difusor y defensor de la música y de los músicos ecuatorianos, pero no es de esa manera que tiene que difundirse. Se va a matar a la radio”. Guerrero cree que los radiodifusores deben tener un conocimiento más amplio de lo que se está produciendo en el país, pues hasta ahora “se han dado el trabajo de desempolvar dinosaurios melosos: Au-D, Right, Clip… Son los mismos acaramelados que ya suenan, sino que ahora, en vez de sonar cinco veces, sonarán 20”.
Entre la música de calidad que Guerrero menciona, y que no ha llegado a las plataformas radiales, están artistas como Daniel Mancero, Fabián Jarrín, Jaime Guevara, Pies en la tierra, Álex Alvear y Wañukta Tonic. “Se debe educar y asesorar a productores, locutores y operadores en cuanto a música hecha aquí. Música ecuatoriana no solo es el pasillo, el yaraví o sanjuanitos, eso es una parte de un gran abanico de lo que se produce”.
El músico y productor ecuatoriano Ataw Allpa, quien encabeza el proyecto Mishky Records, cree que la ley del 1×1 es positiva, aunque no solo debe exigir que se emita música hecha en Ecuador, sino música que represente a la diversidad cultural en el país. “La ley 1×1 no debería ser solo de músicos ecuatorianos, sino con ritmos típicos del Ecuador. Hay que hacer énfasis en la multiculturalidad en la ley: hay etnias que hacen música y que están subvaloradas. No es justo que llenemos las emisoras de pasillos y nos olvidemos de la marimba y de la musicha tsáchila, por ejemplo. Debe ser una reforma integral, que pondere la democratización de la música”, dice.
El músico y cantante Hugo Armijos opina que la ley da la oportunidad a los artistas de hacer un trabajo de mayor calidad. “Antes bastaba con que tu trabajo fuera hecho en Ecuador para que ni siquiera lo abrieran y lo botaran a la basura”. Al permitir la ley del 1×1 que se exporten nuevos talentos nacionales, Armijos cree que esto es una motivación para que los artistas hagan trabajos de calidad y tengan una vitrina para sonar en el país y en el mundo.
Con esta opinión coincide la cantante Tatiana Gorritti, vocalista de la agrupación The Swing & Roll Band. “Es un tema controversial. La ley efectivamente beneficiará al medio musical en el país, ya que es una gran ventaja el poder promocionar tu música sin tener que ofrecer ciertas ‘dádivas’ para que tu trabajo sea aceptado en radio o televisión. Hay música de calidad en el Ecuador, músicos con un trabajo bien hecho, que merece ser escuchado por la gente”.
Solicitud de rectificación a pedido del Consejo de Regulación y Desarrollo de la Información y Comunicación