El horario de clases se alteró ayer en la Escuela Thomas Jefferson, ubicada en el Suburbio de Guayaquil. En los salones de cuarto y séptimo de básica, los estudiantes dejaron de lado sus libros para desarrollar las pruebas del Sistema de Evaluación y Rendición de Cuentas de la Educación, SER 2010.
En la primera banca de su salón, la pequeña Evelyn Burgos respondió más de 100 preguntas, desde las 08:00 hasta las 12:00. Ayer, según el cronograma del Ministerio de Educación, se realizaron las pruebas a los cuartos y séptimos años de básica, en las áreas de matemática, lenguaje y comunicación y factores asociados. Esta última evalúa los factores intraescolares y extraescolares que inciden en el aprendizaje.
La evaluadora Saunneth Errázuriz, de la Universidad de Guayaquil, explicó que los exámenes servirán para detectar qué tipo de falencias presentan los estudiantes. “Al conocer los resultados podremos reforzar no solo conocimientos, sino también conocer las condiciones de vida del niño”.
En esa escuela fueron evaluados 76 chicos. Blanca Vélez da clases a cuarto año y desde hace un mes sumó al plan de clases ejercicios para facilitar el desarrollo de estas pruebas.
Otro de los planteles evaluados fue la Escuela Carmen Sucre, también en el Suburbio. El director, Víctor Soria, dijo que 150 estudiantes participarán este año en las pruebas del Ministerio. Ellos fueron distribuidos en grupos de 30, por lo que tuvieron que instalar bancas en áreas como la dirección y el salón de actos.
En el aula de séptimo de básica, Frank Ramírez resolvía el último cuestionario. Con un lápiz, una hoja y un cuadernillo resolvió las 42 preguntas de factores asociados. Preguntas sobre su vivienda, el nivel de educación de sus padres, servicios básicos en su casa, entre otras, son parte de la prueba.
Entre 1996 y 2007 se aplicaron las pruebas Aprendo. En 1998 y 2006 se aplicaron las pruebas Perce y Serce del Laboratorio Latinoamericano de la Calidad de la Educación. Y desde el 2008 se realizan las SER Ecuador.
En ese año, el promedio en matemática fue de 7 puntos sobre 10; en lenguaje y comunicación fue de 7,69. Las de ciencias naturales y estudios sociales solo se tomaron a los séptimos y décimos años. Y los resultados fueron de 7,795 y 6,44, respectivamente.
Los planteles que obtuvieron las calificaciones más altas en la Costa fueron los privados. Muchos de los colegios fiscales ocuparon los últimos lugares. Para hoy se tiene previsto continuar con las pruebas de ciencias naturales y estudios sociales en las aulas de séptimo y décimos años de los planteles seleccionados.