En el 2018, Pau Donés se presentó en el Ágora de la Casa de la Cultura Ecuatoriana. Foto: Archivo/ EL COMERCIO
Sin duda alguna, Jarabe de Palo es uno de los grupos más conocidos del panorama musical español. Y es que muchas de sus canciones han formado parte de la banda sonora de nuestra vida con el paso de los años. Con Pau Donés a la cabeza, las letras de sus canciones nos han acompañado en momentos de tristeza, de alegría y también de decepción.
En 1996, Jarabe de Palo lanzaba Por un beso de la flaca, canción que se convirtió en un verdadero himno para todos los seguidores del grupo en el verano de 1997. Como el propio Pau confesó después, la historia surgió a partir de un viaje a Cuba donde el músico conoció a ‘La Flaca’ en primera persona, una joven mulata de la isla llamada Alsoris Guzmán, de la que se quedó totalmente enamorado.
Casi 15 años después de su estreno, el videoclip oficial de la canción se subió a YouTube. Entre 2012 y 2020, esta canción ha tenido más de 156 millones de vistas en la plataforma, posicionándose como el más reproducido de la banda en este sitio perteneciente a Google.
En la línea del grupo llegó Bonito, una canción que se estrenó en el 2003 y que optó a un Premio Grammy por Mejor video musical versión corta. Sin duda alguna, su buen rollo y su ritmo la convirtieron en una de las canciones imprescindibles del grupo en cada uno de sus conciertos.
También dentro del álbum de ‘La Flaca’ estaba Grita, una canción con la que la banda anima a expulsar fuera todo aquello que te preocupa para poder disfrutar al máximo de lo bonito que la vida te regala todos los días del año.
La canción Depende saltó a la luz en 1998 dentro del segundo disco de Jarabe de Palo, titulado con el mismo nombre del sencillo, que llegó a convertirse en disco de platino y un éxito total en las listas de ventas globales.
Gracias a Agua, publicada en el álbum en 1998, los fans de la banda pudieron descubrir el dolor por el amor no correspondido. Dejando de lado el baile, Pau presentó una canción lenta y melancólica que se convirtió en una verdadera banda sonora de los amores no correspondidos.
Luego de la publicación del disco ‘De vuelta y vuelta’, en el 2001, la banda regresó con el álbum ‘Bonito’ (2003), cuya canción homónima se convirtió en un emblema del buen ánimo y la esperanza.
Junto con Jarabe de Palo, del 2004 al 2015 publicó otros seis álbumes y realizó giras mundiales. Sin embargo, fue en septiembre del 2015 cuando dio conocer que su tour se paralizaba debido a una operación de Donés por cáncer de colón.
Los siguientes cinco años, sus presentaciones fueron monitoreadas por su equipo médico y volvió al estudio de grabación solo para trabajar en los discos ‘50 palos’ (2017) y ‘Tragas o escupes’ (2020), su última obsesión con la banda.