Las elevaciones rocosas de Los Illinizas son utilizadas por los montañistas para adaptar el cuerpo el ascenso al volcán Cotopaxi. Los aventureros deben caminar cuatro horas desde el refugio Nuevos Horizontes hasta la cumbre. Foto: Fabián Maisanche / El Comercio
Uno de los tres ingresos a la Reserva Ecológica Los Illinizas se encuentra en la parroquia Pastocalle, en el norte de Latacunga.
Los aventureros deben llegar al centro de la parroquia y luego trasladarse al barrio El Milagro, para continuar su viaje por un camino de lastre.
El ascenso en vehículo dura una hora y en el trayecto encontrará a los ganaderos en sus actividades diarias y a otros en el trabajo de sus sembríos de maíz, alfalfa, papas y diversos productos de la zona andina.
Nancy Iza, presidenta de la Junta Parroquial de Pastocalle, indicó que la carretera de tierra es irregular, con varios hundimientos y pronunciadas pendientes de la montaña. La dirigente recomendó conducir con precaución en el ingreso a uno de los picos de Los Illinizas.
“El esfuerzo y el viaje valen la pena. Hay muchas cosas que se pueden encontrar en el trayecto”, manifestó Iza.
Un letrero de madera se colocó en el ingreso a la reserva ecológica, a 4 000 metros sobre el nivel del mar. El camino está rodeado de un bosque de árboles de papel o polylepis, pajas y plantas nativas.
Desde uno de los miradores se observa una parte de la ciudad de Latacunga, y las parroquias vecinas de Mulaló y Joseguango. También hay una vista privilegiada del volcán Cotopaxi y las montañas Corazón, Rumiñahui y Pasochoa.
Mientras se interna a la montaña aparecen extensos pajonales, chuquiraguas, chochos de monte, puyas y romerillos. El frío es intenso en la zona. En este sector también hay mamíferos, como el oso de anteojos, lobo de páramo, conejos, aves, entre otros.
Iza aseguró que estos animales silvestres se encuentran en la parte alta de la montaña rocosa y sin nieve. Al atravesar un pequeño puente de madera sobre un afluente de color amarillento se llega a un lugar que ofrece dos caminos.
Uno de estos va en dirección a La laguna de Los Patos, ubicada a cinco horas de caminata en los altos del Illiniza sur. El agua tiene una tonalidad verde y una playa donde se puede acampar.
El otro chaquiñán va en dirección a las aguas termales, ubicada a 20 minutos del ingreso, que es una propiedad privada y donde se practica el turismo, porque está dedicada más a la conservación.
Las elevaciones rocosas de Los Illinizas son utilizadas por los montañistas para adaptar el cuerpo el ascenso al volcán Cotopaxi. Los aventureros deben caminar cuatro horas desde el refugio Nuevos Horizontes hasta la cumbre.
En el trayecto muestran sus destrezas, habilidades y resistencia para ascender la montaña. Los guías recomiendan escalar la cumbre entre agosto y diciembre, que son los meses apropiados para la aventura.
Rectificación
A pedido de David Larrea y propietarios
En la nota “Pastocalle oferta sus aguas termales”, de la página 5 de la Sección Tendencias del sábado 21 de septiembre, se publicó que la zona de aguas termales, cerca de la Reserva Ecológica Los Illinizas, está destinada para el turismo, sin embargo, esa área pertenece a la Hacienda Río Blanco y es propiedad privada. Por lo tanto, no cuenta con autorización por parte de los propietarios para el ingreso de personas; no es un páramo público.
Las aguas termales, el bosque de polylepis y la cascada -que están dentro de la hacienda- no están habilitadas para los turistas. Este lugar tiene propietarios que están a favor de la conservación y protección ambiental del lugar, según las directrices establecidas por el Ministerio del Ambiente, que brinda apoyo técnico a ese lugar. No se trata de un atractivo turístico masivo, sino de una propiedad privada que tiene poca capacidad para la llegada de personas en grandes cantidades. Ofrecemos disculpas a los propietarios de la Hacienda Río Blanco y a nuestros lectores.