La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, expresó su rechazo a la circulación del bus de la plataforma cristiana CitizenGo en la capital francesa. Foto: AFP.
La ciudad de París reprobó hoy (6 de octubre de 2017) las consignas homófobas que divulga en un autobús la plataforma cristiana CitizenGo, que acusa a las escuelas francesas de enseñar teorías “nocivas” para los niños acerca de la familia y la sexualidad.
“De la oposición al derecho al aborto voluntario, pasando por el matrimonio definido como la unión entre un hombre y una mujer, CitizenGo difunde una visión oscurantista de la sociedad“, denunció el Consistorio que dirige la socialista hispano-francesa Anne Hidalgo.
Esa organización, con base en Madrid y relacionada con la asociación católica francesa ‘La Manif pour tous’, divulga con su autobús “consignas claramente homófobas”, dijo a EFE un portavoz del Ayuntamiento.
Según esta plataforma, “los chicos son chicos” y “las chicas son chicas”.
El vehículo, que circula en París y en ciudades aledañas como Saint-Denis entre el 3 y el 9 de octubre, denuncia que la escuela francesa inculca “una teoría del género” con la que se busca diluir las diferencias entre sexos y sexualidad.
“París y Saint-Denis condenan firmemente esta iniciativa (CitizenGo) y reafirman su apoyo y compromiso en la lucha por el respecto de los colectivos Lgbti“, indicó el Consistorio parisino, que alertó que los “estereotipos” contra los colectivos homosexuales y transgénero “sirven de pretexto para discriminaciones y violencias graves”.
Para los especialistas, los manuales escolares franceses se centran sobre todo en promover la igualdad entre hombre y mujer y no en adoctrinar sobre tendencias sexuales.
La polémica de los manuales escolares se agudizó a finales de 2016, cuando el papa Francisco, recogiendo quejas de familias francesas, denunció que se promovía el cambio de género y la homosexualidad en esos libros.