Conceptos que de usarse mucho en el ámbito gastronómico han ido devaluándose.
La falta de precisión a la hora de describir los movimientos gastronómicos ha resultado en una larga lista de términos que se han devaluado por no tener un significado claro.
El primero, y uno de los errores más comunes, es llamar crítico gastronómico a un criticón de la comida, cuando realmente debe ser un experto en vinos y gastronomía.
El uso inadecuado de la palabra francesa gourmet ha ocasionado la pérdida de su significado original, que alude a un conocedor de ingredientes y técnicas culinarias. Un producto gourmet, concepto impuesto por la costumbre, se refiere a algo -por lo general- escaso, artesanal y con denominación de origen.
Otra palabra mal usada es chef, pues se cree que quien estudia gastronomía se gradúa como tal, cuando, realmente, este término francés quiere decir jefe de cocina.
Culinaria y gastronomía no son sinónimos. La primera palabra se refiere al oficio de la preparación de los alimentos, el cual puede estar ligado al arte. Por otro lado, la gastronomía es una función social que estudia al hombre dentro de los procesos que van desde los cultivos, la relación con la cocina y el medioambiente.
El ‘happy hour’ es uno de los términos abusados por la viveza criolla latinoamericana. En principio, si un cliente compra una bebida alcohólica, recibe una segunda gratis, y es él quien debe consumirla, no su acompañante.
Lo orgánico es uno de los temas populares en los últimos años, pero no todos los productos naturales pueden ser llamados orgánicos, pues, para ser nombrados como tal, deben tener una certificación.
En los tiempos de la cocina de autor, muchos cocineros jóvenes han nombrado sus propuestas de esta manera. Realmente, la cocina de autor es el resultado de la experiencia y se refleja en un estilo propio, con base en el conocimiento de técnicas y procesos.
El término cocina fusión ha sido tomado muy a la ligera. Un cocinero cuyo interés sea hacer cocina fusión debería investigar a profundidad los fundamentos de las cocinas que busca reunir en su propuesta. Este concepto se está diluyendo, pues se está llamado así a cualquier cocina que realiza mezclas de tendencias.
El ‘brunch’ se refiere a una comida generosa servida los fines de semana, pues se acostumbra a despertarse tarde y es conveniente unir dos comidas en una. La confusión surge con la palabra bufet, la cual sugiere una gran comida, sin embargo, la diferencia está en que el ‘brunch’ tiene un motivo de desayuno y debe ser disfrutado sin apuros.
En la cocina molecular se usa ciencia y tecnología. Se ha llamado erróneamente a la vanguardia española de esta manera. Los cocineros españoles han manifestado que debería llamarse cocina evolutiva o tecno emocional.