Hay un dicho en algún lado que dice que mientras más le dicen a una mujer que es la más bella, ella se transforma justamente en eso. Hay mucho de verdad en esta frase que quizás ya se debe haber convertido en cliché.
Según Dorothy Black, escritora especializada en temas de sexo y sexualidad, ser deseados es un afrodisíaco poderoso y, que le digan que le desean, es una poción amorosa excelente.
“Mis amantes favoritos han sido aquellos que no se retraen o que me han dicho cuánto mi cuerpo, mi sonrisa, mis curvas, mis piernas, mi aroma despiertan su interés sexual por mí. Por eso, yo hago lo mismo, incluso con aquellos hombres un poco tímidos, demasiado asustados como para abrir sus bocas y decir lo que sienten. Pero eventualmente lo hacen”, señala Black.
Ella considera que el sexo es un acto de los sentidos y que todos ellos deben ser incluidos, pero que también es un acto de vulnerabilidad y que al verbalizar el aprecio por las fortalezas de la pareja (cualesquiera que estas sean) se cumple con su validación y se levanta su ego. Ningún dios o diosa sexual ha sido creada en medio de miradas aburridas y cejas fruncidas.
“Es obvio pensar que todas las habitaciones sexy deben estar llenas de palabras amorosas y llenas de encanto así como de demostraciones de adoración al cuerpo del otro. Sin embargo, esto no siempre es así. Esta semana recibí una carta de un lector anónimo en la que me comentaba que le había enviado a su amada una explicación de por qué su cuerpo le llevaba al arrebato y por qué el adora acariciarle y tocar cada milímetro del mismo y sentir sus movimientos y sus caricias mientras hacen el amor”, cuenta Black.
¿Por qué son tan sensuales y agradables esta clase de comentarios? Pues simplemente porque no se trata de términos sucios o chistes morbosos sino de expresiones claras, directas y verdaderas que expresan los sentimientos de deseo y aprecio hacia el cuerpo de la compañera o el compañero. No cualquier cuerpo, ese cuerpo en especial.
¿Acaso las mujeres en general añoran ese tipo de trato porque están cansadas de escuchar que desean únicamente sus cuerpos?
Posiblemente así sea porque vivimos en una sociedad en la que se convierte en objetivo al sexo y al cuerpo femenino y es posible que esto haya creado inhibiciones en la cama. “De igual manera los chistes cliché y la ironía nos han llevado a inhibirnos y no lograr ser mejores amantes”, señala la autora.
Pero no son solo las mujeres las que están dispuestas a dejar de lado sus inhibiciones y convertirse en mejores amantes dentro del abrazo cálido y la apreciación deliciosa de las palabras amorosas.
Los hombres también buscan esto. “Los humanos somos cómicos en este tema. Todos queremos ser queridos y nos gusta lo que dicen de nosotros, pero a veces somos demasiado tímidos para decir lo que sentimos. Un buen ejercicio que mejorará la vida sexual de hombres y mujeres y fortalecerá sus relaciones es enviar una carta de amor a nuestra pareja diciéndole lo que su cuerpo significa en nuestras vidas”, señala Black.