La instalación interactiva de Leandro Erlich que se denomina ‘Corre para escuchar’. Foto: Xavier Caivinagua/EL COMERCIO
El parque de La Madre de Cuenca fue el escenario del performance ‘El ciclo de la vida’, de la artista chilena Francisca Benítez. La presentación se realizó el mediodía de este viernes 25 de noviembre de 2016. Esta obra es parte de las 50 que son parte de la XIII edición de la Bienal Internacional de Cuenca.
Es una pieza de creación colectiva en la que participaron los estudiantes de la Unidad Educativa Especial Claudio Neira Garzón. Ellos desde septiembre pasado participan de un taller de improvisación poética de lenguaje de señas ecuatorianas, que estuvo a cargo de Estefani Juca y con la coordinación de Benítez.
Este performance fue desarrollado con el apoyo del Fondo de Iniciativas Comunes de la Unasur, que impulsó la participación de 12 artistas de los países miembros. El proyecto se denomina In-Situ en el Espacio Público y es coordinado por el Museo Nacional de Bellas Artes de Argentina. La selección de las obras estuvo a cargo de Dan Cameron, curador general de la XIII edición de la Bienal.
El performance ‘El ciclo de la vida’, de la artista chilena Francisca Benítez. Foto: Xavier Caivinagua/EL COMERCIO
A más de la chilena Francisca Benítez, los otros 11 artistas son: Alejandro Cesarco (Uruguay), Elias Crespin (Venezuela), Leandro Erlich (Argentina), Adriana González Brun (Paraguay), Natalia González Requena (Bolivia) Miler Lagos (Colombia, Juan Carlos León (Ecuador) Hew Locke (Guayana) José Carlos Martinat (Perú), Henrique Oliveira (Brasil y Marcel Pina (Surinam).
En el parque de La Madre también se presentó la instalación interactiva de Leandro Erlich que se denomina ‘Corre para escuchar’, que está conformada por 63 varillas tubulares y metálicas hincadas en una orilla del parque que funcionan como un gran teclado que devela una melodía cuando el público lo toca.
Las otras creaciones, que tienen el apoyo del proyecto In-Situ en el Espacio Público, están ubicadas en los museos Municipales de Arte Moderno, de la Ciudad y de las Conceptas, Casa Todos Santos, Colegio Benigno Malo, parque ancestral Pumapungo y el parque El Paraíso.
El brasileño Enrique Oliveira trabajó en una cúpula del colegio Benigno Malo y y la boliviana Natalia González Requena elaboró un trabajo perfomático y de documentación visual.