La Organización Mundial de la Salud (OMS) está analizando la posibilidad de utilizar para el tratamiento del ébola medicamentos experimentales que aún no han sido autorizados, en vista de la gravedad de la epidemia en África Occidental.
Un misionero más de hospitales falleció ayer en Liberia a causa del virus del ébola (EVE) y en Panamá, el Gobierno declaró una alerta nacional para prevenir cualquier afectación en su territorio.
Asimismo lo hizo Ecuador, a través del Ministerio de Salud Pública (MSP), que emitió un comunicado el fin de semana para anunciar que se implementan recomendaciones de vigilancia en casas de salud, puertos y aeropuertos.
La Secretaría señaló en el documento que las recomendaciones son las realizadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) frente a la emergencia sanitaria. Así habrá la detección de casos compatibles, un reporte inmediato a las autoridades de salud y la búsqueda de personas que hayan tenido contacto con el EVE en los 21 días posteriores a la aparición de los síntomas.
Para todo ello se anunció que se contará con la colaboración de personal de los establecimientos de salud, aeropuertos y otros puntos de entrada.
En Quito hasta el mediodía de ayer aún no se coordinaban acciones con el nuevo aeropuerto Mariscal Sucre. Lusi Galárraga, gerente de Comunicación de Quiport, sin embargo, dijo que tanto el personal como la infraestructura está presta para ayudar en la detección de posibles casos de contagio.
Según el funcionario, todavía el MSP no ha emitido un protocolo o los pasos a seguir ni ha informado si personal de salud se movilizará a los aeropuertos. Pero consideró que en estos días se podrán coordinar esas acciones en el área de Migración y entrada al país.
De acuerdo con los últimos reportes de la OMS, los países más afectados son Guinea, Sierra Leona, Nigeria, Liberia, países ubicados en África Occidental. Justamente en esos estados han fallecido 960 personas, entre ellas médicos misioneros de Estados Unidos y España (último reporte).
Datos de los países de origen de los extranjeros que llegan a Ecuador señalan que el año pasado llegaron 45 personas de Sierra Leona, 35 de Guinea, 5 de Liberia y 145 de Nigeria. Las cifras se obtienen del Ministerio de Turismo y de la Dirección Nacional de Migración.
El brote de EVE comenzó en Guinea en diciembre pasado; hasta agosto de este año existe transmisión en los países africanos antes mencionados. Estos estados han reportado 1 711 casos (1 070 confirmados, 436 probables y 205 posibles) y 932 de ellos fueron mortales. El MSP sostiene que es el mayor brote registrado hasta ahora.
En Guayaquil tampoco se instalaron controles hasta ayer al mediodía. Julio Palomeque, director general del Servicio Nacional de Control de Enfermedades Transmitidas por Vectores Artrópodos (SNEM), explicó que los controles se enfocarán en las áreas de arribo internacional, tanto en puertos como aeropuertos.
Como medidas de vigilancia se tomará en consideración de dónde vienen los pasajeros, el tiempo de viaje, los países de donde llegan y si han tenido problemas salud durante el traslado. Si padecen síntomas.
El Instituto Nacional de Investigación en Salud Pública (INSPI) estará a cargo de realizar las pruebas de laboratorio. Palomeque indicó que se están conformando equipos con laboratoristas y enfermeras para estos controles.
Sin embargo, hasta la mañana de ayer en el aeropuerto José Joaquín de Olmedo de Guayaquil no se había instalado un área de vigilancia. Nicolás Romero, gerente de la Autoridad Aeroportuaria de Guayaquil, dijo que están a la espera de la disposición del Ministerio de Salud, pues los controles son a cargo de esta Secretaría.
Romero recalcó que la terminal aérea colaborará con el espacio para que se establezca un punto de vigilancia, tal como se hizo durante el brote de la gripe AH1N1 en el 2009.
El MSP ofreció a este Diario una entrevista hoy sobre los protocolos y procedimientos.