Los remedios naturales la han ayudado a evitar resfriados. Josefina Sotomayor tiene 86 años y está convencida de que la medicina alternativa es eficaz para prevenir la gripe.
Ella vive en Chillogallo, en el sur de Quito y en el patio de su casa siembra manzanilla y tilo. También tiene un árbol de eucalipto en el terreno aledaño a su vivienda. “Estas plantas me han ayudado a curarme de la gripe”.
María Torres también recurrió a métodos naturales cuando hace un año prohibieron la venta de antigripales sin receta médica, por el aumento de casos de la gripe AH1N1. “No hay dinero para ir al médico por una gripe. Ahora nos curamos con lo que hay en casa”.
Al respecto el médico homeópata Jorge Cardoso señala que el tratamiento que se realiza con base en plantas medicinales se denomina fitoterapia.
Este método, según reseña Cardoso, tiene como fundamento la utilización de la vitamina C para aliviar la gripe. Entre las plantas y productos que se utilizan para apalear los síntomas y curar el catarro están: la menta, la miel de abeja, el ajo, el jengibre y el tilo (ver cuadro).
El médico explica que la gripe es un proceso viral que aparece y desaparece por si solo. “Si el paciente combate el proceso viral con medicina natural, el cuerpo crea defensas y la siguiente gripe será más leve”.
Las vaporizaciones, las aguas aromáticas, los jarabes elaborados con base en miel de abeja, según Cardoso, ayudan a que el proceso sea más llevadero. “El dolor de garganta y articulaciones y la fiebre disminuyen”.
Sotomayor confía en las plantas medicinales. Por ello tiene a mano miel de abeja. “Trato de curar a mis nietos con jarabes de rábano y cebolla”.
El doctor Jaime Acosta dice que la medicina natural puede ayudar a que el paciente se sienta psicológicamente más predispuesto a defenderse del virus.
Agrega como ejemplo a las vaporizaciones o el consumo de aguas aromáticas. “El paciente se siente bien y pierde temperatura. En el momento de sudar elimina líquidos y toxinas”.
Sin embargo, los dos médicos coinciden en que debe haber vigilancia médica durante el proceso de la gripe. Así se evitarán complicaciones bacterianas como la pulmonía o neumonía.
Advierten que una gripe no se cura con antibióticos ni con antigripales. Acosta dice que estos medicamentos enmascaran los síntomas y pueden generar resistencia al virus. Según Cardoso, bloquean los procesos de drenaje o de secreción normales.
Sotomayor admite que cuando alguien se enferma de gripe en su hogar no acuden al médico. Las razones son la falta de presupuesto para las consultas y la demora en la atención en los centros de salud pública.
Eucalipto
Sus hojas se usan para realizar vaporizaciones. Ayuda a la expectoración. Hay que hervir las hojas en agua a fuego lento por 30 minutos. Dejar reposar y luego aspirar el vapor con la cabeza tapada con un paño.
Rábano
Los rábanos y la cebolla paiteña sirven para elaborar jarabes caseros. Se colocan láminas de esos productos con azúcar. Se los deja reposar por una noche. El jarabe se toma dos veces al día como expectorante.
Miel de abeja
Es fuente de energía, estimula la formación de glóbulos rojos. Tiene alto contenido de vitamina C. Sirve para endulzar aguas medicinales y para aliviar la carraspera por la tos.
Jengibre
Para aliviar la congestión nasal y los dolores de las articulaciones. Se pueden hacer infusiones con una cucharadita de la raíz seca por un vaso de agua. Se debe tomar dos vasos al día. Se le puede añadir naranja y limón.
Propóleo
Es una sustancia resinosa que producen las abejas. Es antibacteriano, antiviral, inmunoestimulante, antiinflamatorio. Se lo puede comprar en forma de extracto, aceites, comprimidos, caramelos y cremas.
Tilo
Son diaforéticas (estimulan la sudoración corporal). Se pueden hacer infusiones con media cucharadita de hojas secas por cada taza. Se debe tomar una taza cada 4 horas.
Limón
Su alto contenido de vitamina C previene el resfriado. Hay que exprimir un limón en un vaso de agua caliente. Se puede endulzar con miel.