‘Apitatán’ plasma en sus murales culturas ancestrales que habitan en nuestro territorio, paisajes ecuatorianos, tejidos andinos y más. Foto: Cortesía ‘Apitatán’
Colores, trazos, mensajes y formas que armonizan con las paredes de casas, edificios, pasos a desnivel, puentes, parques y otros espacios públicos y privados buscan incrementar la cultura y el arte en la ciudad de Quito.
Las temáticas que, por lo general, inspiran a los artistas son las luchas sociales, la cotidianidad, los elementos de la naturaleza, las mujeres, los niños, la belleza urbana e incluso los juegos tradicionales.
Las intervenciones en los diferentes espacios se realizan de manera organizada; es decir, son socializadas con la comunidad del sector elegido y son algunos moradores quienes sugieren a los artistas el tema que quieren y por qué se debe plasmar en el lugar.
“La temática del arte es muy amplia y es interesante cuando haces algo realzando una parte de la realidad para ser contemplada. La puesta en escena de la obra depende del sector y de las actividades que se desarrollen allí, pero generalmente el tema es un manifiesto”, señala el artista Jorge Muñoz, más conocido como ‘Pirata’.
El puente de El Guambra (centro-norte de Quito) fue el lugar que el artista escogió para plasmar a su padre y a su sobrina realizando actividades lúdicas o juegos tradicionales que aún se practican en el parque El Ejido: trompo, canicas, naipes, entre otros.
El estilo que maneja para realizar su arte no es rígido ni limitado. Le gusta experimentar y combinar. Resalta que el color siempre dependerá de los alrededores, porque hay espacios aptos para gamas variadas de tonos y otros en los que se necesita menos; sin embargo, utiliza los contrastes.
La Floresta, La Mariscal, Solanda, Guápulo, San Blas están entre los lugares que ofrecen más apertura para el trabajo cultural que realizan estos artistas, debido a que algunos de ellos presentan constantemente eventos y actividades sociales, en donde no solo dibujantes y pintores sino varios y diferentes artistas tienen gran presencia.
Clara Flores, moradora del sector La Floresta, cuenta que en la esquina de su casa se colocaban bolsas de basura e incluso crecía maleza. A metros de su casa ella vio cómo un grupo de artistas “embellecieron la fachada de una casa del sector, pintando colibríes y otros pájaros de colores” y quiso replicar esto en la suya, tomando en cuenta las plantas que también tiene en su jardín.
Dice que su barrio se caracteriza por la cultura, la luz, la alegría y el arte, por ello ahora su pared es un atractivo para quienes pasan por ahí.
De su parte, el artista Juan Sebastián Aguirre, más conocido como ‘Apitatán’, para sus obras prefiere temáticas como las culturas ancestrales que habitan en nuestro territorio, paisajes ecuatorianos, tejidos andinos, el mestizaje, entre otros similares; sin embargo, también está influido por factores callejeros y el ambiente de los lugares que visita.
El contexto también es importante -afirma-; por ejemplo para su obra en el sector de Chimbacalle investigó sobre culturas antiguas y el ferrocarril. Y en San Roque pintó un cargador, como personaje representativo del tradicional y popular mercado de ese sector.
Dice que desde el 2011 desarrolló una línea gráfica que caracteriza a su obra; las formas y colores que usa obedecen a su estilo más que al sector.
Cuenta que lo que hace cuando pinta una pared en la calle es entablar conversaciones con la gente que se le acerca y le sugiere detalles para su obra o le cuanta historias o recuerdos que les vienen a la mente en el momento de ver su arte.