En esta fotografía de marzo del 2017, Emiliano Sala y Nala, una perrita mestiza color negro, comparten un atardecer juntos. Ella todavía lo espera desde que desapareció el 21 de enero del 2019. Foto: Instagram/ Emiliano Sala.
La esperanza de encontrar vivo al delantero argentino Emiliano Sala se agota. El domingo 2 de febrero del 2019, investigadores británicos dieron con el avión en el que Sala viajaba desde Nantes (Francia) hacia Cardiff (Reino Unido). Lo encontraron a una profundidad de 63 metros en el Canal de la Mancha.
Su familia, amigos y compañeros lo esperan; anhelan su regreso. Pero no solo ellos. Cada tarde, Nala, una perrita mestiza color negro, se sienta frente a la puerta de la casa de la familia Sala;
“Nala también te espera”, escribió Romina Sala, hermana del futbolista, en su cuenta de Facebook el 2 de febrero. Acompañó la publicación con una fotografía en la que Nala aparece de espaldas, mirando a la ventana del hogar en el que conoció al delantero.
Nala se convirtió en la nueva integrante de la familia en el 2015. El jugador, de 28 años, la describía como una fiel compañera en sus redes sociales. No solo documentó el crecimiento de su mascota; sino que también retrató el vínculo emotivo que se formó entre ellos.
En una publicación del 18 de septiembre del 2015, Sala compartió la primera imagen de Nala con sus seguidores. La acompañó con una frase que decía “nueva integrante”.
En otra fotografía, en cambio, del 29 de marzo del 2017, el jugador publicó una imagen, en la que -él y Nala- miran un atardecer naranja juntos.
Emiliano Sala y su piloto, el británico David Ibbotson, de 59 años, volaban el 21 de enero del 2019 en el avión Piper PA-46-310P Malibu de Nantes a Cardiff, pues el delantero deseaba recoger sus pertenencias y despedirse de su familiar para iniciar una nueva etapa como deportista en el club Cardiff City FC. El monomotor desapareció de los radares a unos 20 kilómetros de la isla Guernesey (Reino Unido), ubicado en el Canal de la Mancha.
El 2 de febrero del 2019, cuando hallaron el avión, los investigadores también encontraron un cuerpo sin vida en su interior. Sin embargo, hasta este martes (5 de febrero del 2019) no se ha confirmado su identidad.