El cantante venezolano Nacho fue el principal invitado al festival Quitonia Sur 2017. Se presentó este 1 de diciembre de 2017 en la Plaza Cívica Quitumbe. Foto: Paúl Rivas/ EL COMERCIO.
Cuatro horas esperaron más de 80 000 asistentes del Quitonía Sur 2017 para ver en escena al venezolano Nacho, artista principal invitado al evento que se realizó la noche de hoy, viernes 1 de diciembre de 2017, con motivo de las fiestas capitalinas.
La Plaza Cívica Quitumbe fue el sitio dispuesto para esta edición del festival artístico, que arrancó a las 18:00, con la participación de Orquesta Guayacán y Orquesta Bamboleo.
A las 20:00, los asistentes bailaron con Gerardo Morán y, seguidamente, reguetonearon con el ecuatoriano Helian Evans.
Cerca de las 22:00, y después de una pausa, una serie de fuegos artificiales en el cielo anunció que la presentación estelar de la noche estaba por comenzar.
Este fue un motivo para que las personas que permanecían en los alrededores de la plaza comenzaran a acercarse para entrar en el cercado que se colocó, con 12 accesos controlados por la Policía Nacional.
Pasadas las 22:00, los llamados de los fans del reguetón sacaron a Nacho al escenario. “Ayer pregunte por ti, para saber cómo te va. Me dicen que estás feliz, viajando de aquí pa allá”, se escuchó en la voz del venezolano. Se trata de Materialista, una de las canciones más coreados de la noche.
Mi niña bonita, tema que surgió con su exdupla, Chino, también puso a bailar a los quiteños. Pero cuando sonó el éxito Happy happy, en cuyo video aparece el artista con sus tres hijos, los jóvenes presentes no perdieron la oportunidad de buscar pareja para bailar.
El toque romántico no faltó en esta noche de música y comunidad. Gritos de euforia se escucharon cuando empezó el éxito Me voy enamorando.
A la plaza llegaron grupos de amigos, familias, parejas y personas de todas las edades para disfrutar de las presentaciones musicales y de la oferta gastronómica, que también fue uno de los fuertes de la noche. Platos típicos y comida rápida se ofrecieron a quienes se dieron cita para festejar a Quito en el sur.
Cristina Molina llevó a su hija Paula, de 16 años, y a sus cuatro amigas para que vean a Nacho, que es uno de sus artistas favoritos.
Como ellas, varios asistentes que se ubicaron entre las primeras filas, se vieron obligados a salir de la multitud por falta de aire e inseguridad.
A las 23:00, antes de que Nacho finalice su intervención, los asistentes, especialmente las familias con niños, comenzaron a abandonar la plaza para evitar la congestión multitudinaria del final.