Nicole Rubira encabeza cuerpo de baile en este montaje en Guayaquil. Foto: Enrique Pesantes/ EL COMERCIO.
La cantante guayaquileña Nicole Rubira sufrió tendinitis en la pierna derecha y se lastimó el tobillo como parte de la exigencia coreográfica del papel de Velma Kelly, en la pieza de teatro musical ‘Chicago’, que le valió un Oscar a la actriz estadounidense Catherine Zeta-Jones en la película musical homónima del 2002.
La agrupación Danzas Jazz realiza la adaptación del musical estadounidense más exitoso y representado de Broadway, que esta vez se presenta en el Teatro Sánchez Aguilar del Guayaquil metropolitano.
“Me he roto, pero he dado el 100%”, indicó Rubira, quien se dice “honrada” con interpretar el papel de la oscarizada Zeta-Jones. “Tengo 12 años actuando en musicales, pero esta vez me ha tocado interpretar a una bailarina, una estrella del vodevil que asesina a sangre fría a su hermana y a su marido en un crimen pasional, entonces el esfuerzo físico y mental ha sido mucho más grande”.
La historia está ambientada en la ciudad de Chicago durante la era del jazz y de la ley seca en Estados Unidos. “Es una obra basada en hechos reales, que se centra sobre todo en dos asesinas de los años 20 que encuentran en la fama la única vía para recuperar su libertad y es una burla al sistema judicial”, agregó Rubira.
El espectáculo está basado en la obra teatral homónima escrita por la periodista Maurine Dallas Watkins y publicada en 1926, a partir de los crímenes reales que ella misma cubrió para el periódico Chicago Tribune. La obra entraña también, desde la comedia, una “ácida crítica” al concepto de criminales estrellas y una “sátira” contra la corrupción del sistema judicial según el director de la pieza, José Miguel Salem.
En una de las coreografías iniciales, una de las “seis adorables asesinas de la cárcel del condado” cuenta que le disparó a su esposo con la escopeta doméstica dos tiros de advertencia, en la cabeza. Otra dice que su pareja en un ataque de celos vino hacia su cuchillo y se hirió 10 veces.
Las historias de las criminales, entre tensionantes y chistosas, se intercalan con un coro de las seis cantantes (“Ya se veía, se veía, nadie diría que estuvo mal…”, cantan) y la música de 11 instrumentistas dirigidos en vivo sobre el escenario por el director de orquesta argentino Dante Anzolini.
Salem, director de la compañía guayaquileña Danzas Jazz, sostiene que la puesta en escena de su musical preferido luego de 31 años de producción de obras de este tipo, implica un homenaje al género del musical y a lo que significa Broadway a través de ‘Chicago’.
La cantante Luchiana Hakman, como otra de las asesinas, complementa el elenco principal junto a Patricio López, quien interpreta a un abogado manipulador y sin escrúpulos.