En la muestra hay 150 piezas prehispánicas. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO
Con ‘Divers[]s’, la muestra temporal que se inaugura mañana, 6 de junio del 2019, en el Museo Nacional del Ecuador (MuNa), los investigadores María Fernanda Ugalde y Hugo Benavides buscan activar nuevas reflexiones sobre la visión del género en el mundo prehispánico local.
Ugalde -arqueóloga y docente de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador -cuenta que el interés por suscitar estas nuevas relecturas surgió de un trabajo de investigación sobre la iconografía de figuras prehispánicas de la Costa ecuatoriana.
“Durante mis investigaciones -dice- me fui dando cuenta de que habían piezas que no podían ser encasilladas dentro del sistema binario tradicional de hombre o mujer por las características que tenían”, dice.
Varias de estas ‘anomalías’ las encontró en piezas famosas de la cultura Tolita que representan a parejas y que muestran similares características en relación a sus cuerpos. La diferencia está en cómo han sido nombradas. En la que aparece un hombre y una mujer: matrimonio y en la que aparecen dos mujeres: siamesas.
A criterio de esta investigadora, este ejemplo, que es parte del eje ‘Las percepciones del género en el pasado’, muestra cómo las personas que las nombraron tenían una visión totalmente sesgada y heteronormativa. “La idea de esta muestra es que haya relecturas menos binarias sobre el género en estas culturas”, sostiene.
Entre los intereses de estos investigadores también está evidenciar las diferencias que había en las representaciones de hombres y mujeres en el mundo prehispánico.
A través del eje ‘Estratificación social y patriarcado’ se muestra cómo en el periodo de Desarrollo Regional, en las culturas Tolita, Tumaco, Jama Coaque, Bahía, Guangala y Jambelí, los hombres siempre aparecían con muchos adornos y vestimentas y realizando diversas labores como la pesca, la caza y actividades artísticas, mientras que las mujeres aparecían de una forma más pasiva, “cuando estaban haciendo algo era a temas vinculados con la maternidad”, cuenta Ugalde.
El tercer eje lleva por nombre ‘Los inicios del arte figurativo’ y busca poner en evidencia cómo en el periodo Formativo, en las culturas Valdivia, Machalilla y Chorrera, la figura femenina era predominante. “Por el motivo que fuere, a lo largo de varios miles de años, las personas que ocuparon la Costa ecuatoriana consideraron importante representar primordialmente a personajes femeninos”.
Para Santiago Ontaneda, arqueólogo del MuNa, esta muestra también es una oportunidad para que el público piense cómo funciona la normatividad en el mundo occidental y cómo posiblemente funcionaba en el mundo prehispánico. “Aquí el especialista no es el que tiene la última palabra sino las personas que, desde sus criterios, van a nombrar a lo que están viendo”.
Para que este ejercicio sea más interactivo la exposición contará con espacio lúdico. En este lugar se incluyeron replicas de varias piezas con el objetivo de que las personas puedan tocarlas. Una de ella es una pequeña figura cuyo rostro tiene rasgos femeninos, silueta de mujer y un pene.
La mayoría de las 150 piezas de la exhibición provienen del acervo del Ministerio de Cultura y Patrimonio pero también hay piezas que fueron prestadas por el Museo Casa del Alabado. El acceso a la muestra es libre.