En el colegio le decían la ‘Chica Fashion’. Su gusto por la ropa y los accesorios la inspiraron a ser una modelo a sus 17 años.
Carolina Mora -a pesar de tener un diagnóstico con síndrome de Asperger, trastorno neurobiológico que forma parte de un grupo de afecciones denominadas trastornos del espectro autista- se graduó en la agencia y academia DIS Modelos de Quito.
Mónica de Mora, su madre, comenta que a Carolina siempre le gustó vestirse sola y hacer sus propias combinaciones. Desde que tiene 1 año de edad ha usado sombreros. Este accesorio es muy importante para la joven modelo, ya que lo usa en todo momento. En la actualidad tiene cerca de 80 accesorios entre sombreros, boinas y adornos para cabello como flores grandes o diademas.
Antes de incursionar en el modelaje, ella diseñó varios vestidos que fueron usados por sus amigas del colegio en dos desfiles que se realizaron por la noche. Este factor fue el que motivó a su familia a buscar una agencia de modelos que le ayudará a cumplir su sueño.
“Estas son las satisfacciones más grandes que mi hija me ha hecho sentir como madre”, expresa Mónica.
Durante su estancia en la agencia, Carolina aprendió varias técnicas de modelaje. Lo que más le gusta es el vestuario y la fotografía, a pesar que le resulta difícil posar de forma seria, ya que le gusta estar sonriendo todo el tiempo.
Carolina Molina a sus 17 años incursionó en el mundo del modelaje. Foto: María Isabel Valarezo/ EL COMERCIO
“Yo me visto de cualquier forma, ya sea loca o normal. Una vez me vestí de hippie y de vaquera”, dice Molina.
En su primer desfile se puso tan nerviosa que incluso le dieron ganas de llorar. Sin embargo, cuando empezó a caminar se tranquilizó y enseguida empezó a sonreír y evitar mirar a las personas que estaban en el lugar.
Pietro Pólit, gerente de la Agencia DIS, indica que con la llegada de Carolina a la agencia se empezó a realizar un proyecto con el objetivo de dar un espacio a las personas que quieren incursionar de alguna manera en el mundo del modelaje respetando sus capacidades diferentes.
Valeria del Pozo, de 21 años, se considera “una persona sorda” y decidió incursionar en el mundo del modelaje con el apoyo de su madre Magali, quien haces las veces de su traductora.
Por ello, con la Fundación Grace Pólit, organización particular de carácter benéfico para personas con discapacidad auditiva, se está planificando abrir en abril más talleres de modelaje para personas con discapacidad.
Las clases en la agencia tomaron un rumbo diferente con estas dos chicas aspirantes a modelos. Pólit explica que Carolina tuvo horarios especiales para nivelarse. Pero a las pocas semanas empezó a trabajar junto con sus compañeros de la agencia.
Mientras que con Valeria tuvieron que aprender técnicas del lenguaje de señas junto con su madre, para enseñarle a caminar en la pasarela ya que las modelos necesitan de la audición para mantener el equilibrio y caminar. “A pesar de esta dificultad auditiva tiene una excelente pasarela”, dice Pólit.
Esta joven modelo está apunto de viajar a un concurso internacional y representar al país en el concurso de belleza de Miss Sorda, que se realizará en Centroamérica en este año.
Valeria del Pozo Peña, de 21 años, estudió modelaje en la agencia Dis de Quito. Foto: María Isabel Valarezo/ EL COMERCIO
El gerente de DIS menciona que se han analizado los otros tipos de discapacidad para ver si es factible formar más modelos. Siempre que se pueda manejar su condición y vincularla con esta actividad.
A pesar de que Valeria no puede escuchar, desde que era adolescente sintió afinidad por el modelaje. Su inspiración fue Tyra Banks, una supermodelo, presentadora de televisión y productora cinematográfica estadounidense.
Para ella fue una emoción saber que la agencia de modelos la aceptó a pesar de su discapacidad. Al inicio fue complicado, ya que debía hacer las actividades al igual que las demás chicas. Pero logró graduarse y esto se constituyó en una de las pocas ocasiones en las que se sintió igual que las oyentes, sin sentirse discriminada por la sociedad.
“A mí me gusta ser modelo y ser una reina del mundo, ya que al ser reina se puede ayudar a la comunidad sorda”, expresa Valeria.
Precisamente, la expresión se convirtió en el factor fundamental para que las personas puedan entenderla.
Su madre Magali ha sido el pilar fundamental de su vida, ya que ella le ayuda como traductora desde el primer día que empezó en la agencia.
En contexto
Señorita y Señor Sordos International Inc. es una organización que se compromete a potenciar, mejorar y apoyar a la comunidad de sordos de mujeres y hombres. Los ganadores de este concurso son distinguidos como embajadores de la comunidad sorda.