Artesanos de San Antonio de Ibarra esculpen tacones de Jacqueline Moncayo. Foto: Cortesía Andrea Tello Jewelry
Crear fuentes de trabajo con condiciones justas, promover la capacitación, incentivar la supervivencia de saberes y retribuir a la sociedad son algunas de las características de las marcas con impacto social.
En Ecuador hay al menos cuatro firmas reconocidas en esta categoría: Taarach, Andrea Tello Jewelry, Hakhu y Jacqueline Moncayo.
Taarach recibió, a inicios de septiembre, el Design Excellence Award 2020 en Impacto Social. Este es un premio otorgado por el Consejo de Accesorios, un organismo internacional basado en Nueva York.
La firma ecuatoriana se sobrepuso a competidores internacionales debido a un doble esfuerzo. Por un lado Mireya Gómez de la Torre, fundadora, busca rescatar las fajas elaboradas en telar manual por artesanos imbabureños. Por otro, la diseñadora cree que es su obligación retribuir a la sociedad. Lo hace con donaciones que apoyan al proyecto salesiano Por el pan de cada día.
Andrea Tello obtuvo en el 2011 el certificado del Programa de Reconocimiento a la Excelencia Artesanal de la Unesco. Este título toma en cuenta, entre otros, el desarrollo sostenible de las empresas artesanales.
La diseñadora cuencana capacita constantemente a jóvenes de Chordeleg y de Gualaceo, con el fin de crear fuentes de trabajo, mitigar la emigración y mantener viva la técnica de la filigrana. Apoya, a través de donaciones o préstamos, la creación de talleres para que los nuevos artesanos abran sus propias líneas de joyas.
Hakhu es un emprendimiento social que nació en el 2017 con la capacitación en bisutería de 250 mujeres de Napo, Pastaza y Orellana. Esta marca ha recibido el apoyo de figuras ambientalistas como Leonardo DiCaprio, quien dio a conocer a Hakhu en el sitio web de su fundación oficial.
Leo Cerda, cofundador, cuenta que el objetivo es crear fuentes de ingresos no extractivos que, al mismo tiempo, permita a las mujeres continuar con la enseñanza y cuidado de sus hijos. En octubre Hakhu lanzará una línea de aretes, en alianza con mujeres de la nacionalidad Waorani.
Jacqueline Moncayo es una marca de calzado de lujo que exhibe sus productos en Dubái, Nueva York, Beverly Hills y España. La diseñadora ecuatoriana trabaja con zapateros en España y con escultores de San Antonio de Ibarra.
Los artesanos ecuatorianos esculpen los tacones y les dan un acabado en pan de oro. Moncayo ha promovido la producción en cadena, es decir, que cada artesano se especialice en una parte de la creación para lograr eficiencia.
Con sus productos y con base en el pago justo, la diseñadora quiere incentivar a que los jóvenes aprendan estas técnicas tradicionales.