La forma de comunicar un fallecimiento por causas médicas, una enfermedad grave o que le queda pocos días de vida a una persona es una situación común en los hospitales, pero no por eso es agradable.
Según datos del Instituto Nacional de Donación y Trasplante de Órganos, Tejidos y Células (Indot), los médicos experimentan un nivel de estrés en el momento de dar a conocer este tipo de noticias, y por ello prefieren decirlo de una manera técnica o directa.
Para contrarrestar este problema y para mantener un acercamiento entre el médico y los familiares o pacientes, el Indot, una entidad adscrita al Ministerio de Salud, lleva adelante el curso Comunicación en Situaciones Críticas.
Javier Bermúdez, de la dirección técnica del Indot, explica que durante tres días (hasta mañana) se enseñará a los médicos las técnicas de comunicación, reflejo de emociones, resumen de información para que puedan aplicarlo con sus pacientes. “Ser sincero es bueno, pero hay que saber cómo dar una mala noticia”, dice.
Al evento, que se desarrolla en el Hotel Colón, asisten 60 médicos de áreas críticas: emergencia, neurocirugía y terapia intensiva de los hospitales: Eugenio Espejo, Baca Ortiz, Enrique Garcés, Pablo Arturo Suárez, Carlos Andrade Marín, Militar, de la Policía, de los Valles, Metropolitano, además de la Maternidad Isidro Ayora y del Hospital del IESS de Ibarra.
Como parte de los talleres de comunicación, los galenos también aprenden técnicas para que, sin trasgredir el momento de dolor, comuniquen los beneficios de la donación de órganos, una vez que una persona ha muerto.
La idea es que los familiares sepan que, por ejemplo, la donación de órganos dura entre cinco y seis horas. Además, deben saber los lugares en los que se realizarán los cortes y que, a pesar de donar los órganos, el cuerpo no se mutila.
En el país, según datos del Indot, más de 160 personas esperan un trasplante renal, 15 pacientes están en espera de un trasplante hepático y más de 550 personas esperan una córnea.
Julio Campoverde, cirujano coordinador de trasplantes del Hospital Pablo Arturo Suárez, uno de los asistentes al taller, señala que en el país aún la gente tiene temor a donar sus órganos, y más porque aún proliferan los mitos.
La gente cree que al donar un órgano determinado se replicará en otra persona los sentimientos de la persona que falleció o se trasladará su personalidad. “Eso es solo un mito. Esto es solo un proceso técnico donde se extrae un órgano y se trasplanta a otra persona”.
Tres años de cursos
- El curso cuenta con SEnS el apoyo de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) de España en el marco de un convenio que mantienen los dos países.
- El curso está dirigido a profesionales de la salud de las especialidades de Neurología, Neurocirugía, Cuidados intensivos, Emergencia, coordinadores de Trasplante y Nefrología de la Red Pública y Complementaria de Salud.
- El curso de comunicación se dicta en el país desde el 2010, siendo este el segundo ciclo en lo que va del 2013. En abril fue dictado en Machala, Guayaquil y Cuenca, en donde se capacitó a 70 profesionales.