El maltrato infantil en niños de escuelas es causado en especial por los compañeros de los grados superiores. Así lo revela un estudio de la Facultad de Psicología de la Universidad Católica Latinoamericana, que se efectuó en Quito.
La investigación fue aplicada en tres planteles fiscales del centro de la capital, entre junio del 2009 hasta febrero de este año.
1 500 niños del primero al octavo año de educación básica fueron sometidos a un cuestionario, elaborado por los estudiantes de esta facultad.
Los resultados revelan que el maltrato infantil es causado en un 40% por alumnos de grados superiores, en un 35% por compañeros de la misma aula, en un 10% por los profesores de clase y en 2% por el director del plantel.
Ángel Pauta, decano de la Facultad, resalta que el índice de maltrato físico y psicológico por parte de los maestros ha decrecido. “Hace 10 años había el 100% de maltrato de parte de los profesores. Ahora se habla de un 10%”.
Para Héctor Boada, profesor de la Facultad y director del estudio, la alerta está en los datos acerca de que la agresión viene de los mismos compañeros. “Un niño que maltrata, es un niño que es maltratado”. Este es un posible indicador que es víctima de violencia intrafamiliar, comenta.
¿Y cuáles son los tipos de maltrato? El grito es el más frecuente, en el 40% de los casos. Siguen los insultos con el 20%, y los golpes, halones de orejas y uso de la regla, con 10%. El mismo porcentaje corresponde a las mofas frente al resto de compañeros y el contacto de las partes íntimas.
La Universidad Católica Latinoamericana propone la instauración de un programa de prevención y ayuda al niño maltratado en todas las escuelas del Distrito Metropolitano de Quito.
Este proyecto ya se aplica en la escuela fiscal mixta Armada Nacional. Es un plan piloto que es ejecutado por las alumnas Gabriela Ordóñez y Belén Pañi.
Ordóñez explica que en el tratamiento del problema se involucra a todos los actores que intervienen en el círculo del maltrato (niños, padres de familias y maestros). Entre los resultados obtenidos, Pañi destaca la conciencia que se genera en los niños para no callar los hechos. También que el abordaje con los actores es integral y no individual.
La frecuencia con que se presentan estos abusos no es de todos los días. Los niños manifestaron que es a veces (70%), casi siempre (5%) y siempre (5%).
Para César Rea, estudiante que participó en el estudio, es importante trabajar con todas las partes para lograr resultados efectivos. Y destaca que la encuesta puso en evidencia la poca confianza que los niños tienen en los profesores (13%), en el padre (30%) y en la madre (25%). “Si un niño no confía en sus padres y maestros, no tendrá la seguridad para avisar un maltrato”.
La facultad de Psicología continuará con el estudio en el resto de escuelas de Quito. Los resultados se entregarán a la Dirección Provincial de Educación.