El Centro de Desarrollo Turístico Comunitario Lita, ubicado en el centro poblado, tiene como objetivo mostrar la cultura y gastronomía autóctona de esta localidad de Imbabura. Fotos: Álvaro Pineda / EL COMERCIO
Seis cabañas de caña guadúa con capacidad para alojar a cuatro huéspedes en cada una resaltan en el verde paisaje del bosque tropical de la parroquia de Lita, en Ibarra.
Cada inmueble posee dos dormitorios, una sala–comedor, cocina y baño. La idea es ofrecer confort a los visitantes de este paraje natural, asegura David Tapia, administrador del Centro de Desarrollo Turístico Comunitario Lita. El sitio empezó a recibir a viajeros desde el mes anterior.
El flamante establecimiento turístico, que fue construido por el Municipio de Ibarra a un costo de USD 1,1 millón, es administrado por la Aso Turismo Lita.
Se trata de una organización conformada por las 16 comunidades de este poblado subtropical, ubicado en el límite entre las provincias de Imbabura y Esmeraldas.
En esta localidad cohabitan mestizos e indígenas awá, que son los más numerosos. Las etnias que viven en esta parroquia son un valor agregado para que los excursionistas puedan conocer las diferentes culturas, asegura Alba Terán, funcionaria de la Municipalidad.
El alegre y continuo murmullo del río Lita, que serpentea el Centro Turístico, invita a sumergirse en la naturaleza.
En el nuevo centro también se edificó un área de restaurante. Hay ocho locales que serán atendidos de forma alternada por emprendedores de las 16 parcialidades, explica María Urbina, vocal de la junta parroquial local.
Ahí se podrá degustar gastronomía típica de la zona como caldo de gallina criolla, seco de pollo, pescado frito. También, comida costeña como platos de mariscos, empanadas y bolones de plátano verde.
En las dos hectáreas que abarca este inmueble también se instaló una piscina con tobogán, vestidores, baterías sanitarias y el área administrativa. Igualmente, posee escenarios deportivos para la práctica de fútbol, baloncesto y juegos infantiles.
Por el mes de apertura, la tarifa de las cabañas para alojamiento es de USD 72 diarios. Ese costo incluye cuatro desayunos. Para quienes prefieran visitas cortas hay una alternativa de Full Day, que incluye refrigerio, almuerzo y el uso de las instalaciones recreativas.
Esta iniciativa ha empezado a tener acogida de agencias de turismo que operan en la zona, asegura David Tapia.
El objetivo es que el Centro de Desarrollo Turístico Comunitario Lita no sea solo un punto de llegada de turistas, sino que también contribuya a la dinamización de otros emprendimientos de la zona.
El Rinconcito Turístico Palo Amarillo, ubicado en la comunidad del mismo nombre, ofrece actividades de senderismo y rapel. También hay fincas agrícolas que han abierto sus puertas a los visitantes.
Por eso, se trabaja en establecer circuitos turísticos en Lita, explica Alba Terán.
El modelo de gestión para el funcionamiento del centro incluye el acompañamiento técnico del Municipio a las comunidades, durante el primer año de funcionamiento. La asesoría incluye un administrador, un jefe de cocina y un contador.