Las matrículas en los planteles fiscales y particulares se iniciaron ayer y se extenderán hasta el 3 de septiembre. Afuera de las instituciones de Quito se vieron largas filas, pese a que algunos centros organizaron un cronograma.
María Gualotuña y Joe Crisanto estuvieron a las 07:00; se unieron a la columna de padres de familia para recibir un turno en el Colegio Experimental Quito, en el sur de la capital. Cada día, el portero de la institución entregará los tiques con el respectivo número y a diario se atenderá a 200 padres de familia.
fakeFCKRemoveGualotuña tenía el turno número 101. A pesar de que la mayoría de estudiantes acompañó a sus padres para reencontrarse con sus compañeras de curso, su hija Priscila se quedó en casa porque está enferma. La mujer y su esposo comentaron que el único problema que tuvieron en la jornada fue que se olvidaron de pagar el costo del transporte. “Lo usamos porque vivimos en Amaguaña y el Colegio Quito nos queda bastante lejos”.
Utilizar el transporte de los planteles no es un requisito, según explica la directora provincial de Educación de Pichincha Norma Alvear. Las instituciones también tienen prohibida la venta de uniformes. De incumplir la norma, los padres deben denunciarlo en las direcciones de Educación de cada provincia.
Sin embargo, Cecilia Fuentes, vicerrectora del Colegio Quito, señaló que esta institución vende las faldas para el uniforme. Argumenta que por ser un colegio experimental, las mismas alumnas elaboran esta prenda. dentro de la institución.
Mientras que en la escuela Virginia Larenas, en el sur, no existe un cronograma específico. Los alumnos de segundo a séptimo de básica pueden matricularse hasta el 3 de septiembre.
Gladys Pachacama llevó al trámite a su hija Génesis Alacrón, quien ingresa al segundo de básica. La mujer se extrañó de que luego de que su hija salió sorteada, mañana deba acudir a rendir un examen. Pero el rector Bolívar Bolaños aclaró que se trata de una prueba para que los profesores conozcan el nivel de aprendizaje de las alumnas.
Los colegios particulares también empezaron ayer el registro de sus alumnos. El ambiente estuvo calmado en el San Fernando, ubicado en el centro de Quito. En el primer día de matrículas no hubo aglomeraciones, la fila estuvo conformada por máximo cinco padres de familia. En la Secretaría del plantel, Luis Tinajero se encargaba de recibir la documentación.
El funcionario indicó que el período de matriculación ordinaria se extenderá hasta el martes 31 de agosto. No existe un cronograma de matrículas específico por curso. Los representantes de los estudiantes pueden acercarse cualquier día a realizar el trámite. El horario de atención es de 07:30 a 15:30. Hay cupos disponibles para todos los años, incluso para el octavo de básica.
El proceso de matriculación dura entre 10 y 15 minutos. El padre de familia debe entregar una carpeta con la documentación que se pide, luego con una hoja de ruta se dirigen a los departamentos de inspección, orientación vocacional y rectorado para la revisión de los documentos y firmas respectivas.
Estos pasos los cumplió ayer Luis Donoso, “prefiero hacer la gestión a tiempo para después no tener inconvenientes”.
Él será el representante de su sobrino, quien cursará el noveno año. Hilda Pacheco, otra madre de familia, fue al colegio para averiguar la fecha de matrícula de su hijo Bryan Márquez, quien va al segundo de bachillerato.
Las matrículas comenzaron ayer en la mayoría de planteles, pero en centros como el Mejía empiezan hoy. Ayer solo se entregaban los certificados de pase de año. En el Montalvo, en cambio, serán desde el 23 hasta el 30 de agosto. A su vez, los centros municipales ya terminaron su fase de matrículas.
Entre tanto, ayer en la mañana hubo aglomeración de padres en los centros de salud como el de Chimbacalle, en el sur, en busca de un certificado médico de sus hijos. Este es un requisito para el registro en los planteles.