Jorge Drexler, cantautor uruguayo, se presenta por tercera vez en Quito. El concierto es parte de la gira de promoción de ‘Bailar en la Cueva’. Foto: Cortesía Jorge Drexler.
Para componer los temas de ‘Bailar en la Cueva’, Jorge Drexler se fue solo a Cantabria, una localidad en el norte de España. Alquiló una casa frente al mar y se llevó su tabla de surf. De ese tiempo que permaneció en aislamiento (una semana) nacieron la mayoría de temas que conforman su último material discográfico.
Al contarlo, en su voz se mezclan dosis iguales de serenidad y emoción. A Jorge le gusta hablar- lo confiesa y se nota- le gusta dar entrevistas y no escatima en detalles. Expone con orgullo y alegría los pormenores del proceso que desencadenó en el lanzamiento de su álbum número 14, en marzo de este año. Lo hace desde un hotel en República Dominicana, dos días antes de su arribo a Quito.
Solo, en Cantabria atravesó periodos de bloqueo que, a su parecer, son claras señales de que se está dejando de lado el automatismo. De igual forma en su retiro, alternó los momentos de escritura sedentaria con los de remontar olas. Al cumplir 50 años de pronto, “el cuerpo se vuelve muy presente (…) tiene una fecha de caducidad”, confiesa.
Con los temas listos llegó la hora de la grabación. Eligió Colombia por la energía y el potencial cultural de la región, mismos que emanan en gran parte de los países latinoamericanos. Además tenían un grupo de amigos en Colombia con quienes se entendía perfectamente (él y su equipo), encabezado por Mario Galeano (coproductor del disco).
Aunque tiene muchos recuerdos gratos de su experiencia en Bogotá, durante la charla, rememora uno en particular. Durante un homenaje que les prepararon en la casa de Galeano pusieron unos vinilos de música colombiana antigua- de los años 50, 60 y 70-.
En algún momento, relata Jorge, decidieron probar el Shazam y se dieron cuenta de que éste no identificaba ninguna canción: ninguno de esos temas había sido digitalizado, por lo tanto esa música fabulosa estaba fuera del área de Internet. “Teníamos la sensación de estar escuchando una música que no se iba a repetir nunca” describe emocionado el cantautor.
El producto final, que primero pasó por Cantabria, luego Bogotá y también Madrid, fue la última pieza de una trilogía iniciada con ‘Amar la trama’ y seguida por ‘N’. El primero fue un álbum ante todo emocional “ubicado en el centro del pecho” y la producción en formato de aplicación (‘N’) fue totalmente razonada y un desafío técnico enorme.
Entonces, ‘Bailar en la Cueva’ se crea para completar el tercer componente, el cuerpo, el centro motriz, los pies…el movimiento.
Entrevista completa a Jorge Drexler
En su nuevo disco el baile/la danza se suma a la música y a la lírica ¿qué lo llevo a explorar a fondo este territorio?
Simplemente el hecho de salir de mi zona de confort, que es la zona de las ideas y de los sentimientos. Salir de mi zona de confort y llevar la música al cuerpo, ya que la parte rítmica y corporal de la música la tenía menos trabajada. Para mí era muy interesante buscar por ese lado. A mí me gusta que los discos siempre tengan un territorio nuevo. Y este territorio nuevo en este disco son los pies. Eso no quiere decir que se descuiden el resto de componentes.
¿Le gusta bailar?
Me gusta mucho.
¿Qué tipo de música?
Bueno…Me tiene que gustar la música para bailar. No puedo ir a un sitio y bailar algo que no me guste. La música que me gusta es muy amplia, me gustan los ritmos folclóricos, la música popular de cada país. Bailar samba en Brasil, cueca en Chile, vallenato y cumbia en Colombia. Anoche fuimos a buscar los bares de merengue en Santo Domingo.
En alguna entrevista anterior menciona que la danza tiene virtudes curativas, ¿cuáles son?
El baile es una de las actividades que involucra más áreas del cerebro, todas las áreas de coordinación, las áreas emocionales. No puede ser hecho sin estar en el presente, como dice la primera canción, sin cerrar el juicio, sin cerrar los ojos. Cuando uno baila conectado disuelve el ego, es una actividad meditativa, maravillosa.
‘Bailar en la Cueva’ tiene un pulso totalmente Latinoamericano, al residir en España ¿qué es lo que más extraña de la región?
La verdad es que vengo tanto a Latinoamérica que no extraño tanto. Este año es la séptima vez que llegó a Latinoamérica desde España, la séptima vez que cruzo el Atlántico, así que no llego a extrañar. Pero sí puedo decir lo que vengo a buscar….es la energía que tiene este continente, la energía anímica, la energía creativa, dada por una historia muy vibrante.
¿Qué te inspiró al momento de componer los temas de ‘Bailar en la Cueva’? ¿Fue un proceso fluido o tuviste complicaciones?
Cuando se toma la composición en serio significa no trabajar con el piloto automático. Eso es tratar de desmantelar los preconceptos y empezar a escribir desde cero la canción, allí se presentan los bloqueos. Éstos (los bloqueos) aparecen reflejados en una canción, La noche no es una ciencia exacta, que habla del hecho de componer y de que escribir canciones no es una ciencia exacta.
¿La composición tiene un lado oscuro?
No hay ningún fenómeno del ser humano que no tenga un lado oscuro. Todo tiene un derecho y un revés en todo. No es un periodo ameno, la composición. Yo no escribo mucho, escribo una vez cada dos años. No soy muy buena compañía cuando escribo, no lo paso bien. No es una actividad divertida porque me lo tomo muy en serio, entonces paso todo el tiempo oscilando entre el lado oscuro de la frustración y el lado excesivamente luminoso de la inspiración. Para mi componer es perder la perspectiva, yo me obsesionó.
¿Cuál es el concepto detrás del video de Universos Paralelos?
El asunto es así, me cuesta mucho hacer videoclips, no me gustan mis videoclips. Habrá dos o tres (de un total de 15) que miro con alegría, a los demás no los puedo ni ver. Éste es uno de los que me gustan. Faltaba una semana para hacer el videoclip y yo no tenía nada. En una comida con tres amigos (con los que se junta a comer semanalmente en Madrid) les digo que tengo que rodar el video y no tengo nada. Y de repente me viene la idea de hacer una coreografía y bailar nosotros cuatro. En esa mesa de amigos estaba el director del video, David Trueba; el productor, Javier Limón, y un presentador de programas culturales, Tony Garrido. Una amiga mía, Patricia Rus, que es coreógrafa nos dirigió y diseñó la coreografía.
Hoja de vida
Ganó en noviembre de 2014 dos premios Grammy Laitno en las categorías Grabación del Año y Mejor Álbum de Cantautor.
Ganador en el 2005 de un premio Oscar por la canción Al otro lado del río de la película ‘Diarios de motocicleta’.
En ‘Bailar en la Cueva’ cuenta con la colaboración de Caetano Veloso, Bomba Estéreo, Calle 13 y Ana Tijoux.
Audio rueda de prensa de Drexler