Israel inauguró uno de los mayores complejos desalinizadores del planeta.
“Es la mayor planta desalinizadora con ósmosis inversa. Además, constituye un avance en el ahorro de energía, lo que permitirá reducir el costo del agua”. Así lo comentó Teddy Gola, vicepresidente de IDE Technologies, compañía operadora del complejo.
El portal www.revistahorizonte.org publicó que la planta, que se ubica en la ciudad de Hadera, en la costa del mar Mediterráneo, producirá mediante la tecnología de ósmosis inversa 127 millones de m³ de agua al año. Esa cifra equivale al total de la cantidad producida por otras dos plantas.
Las instalaciones son capaces de proveer casi el 20% de la demanda de agua potable del país de Oriente Medio.
En los próximos años, Israel planea construir dos plantas desalinizadoras más debido al creciente déficit de agua potable que padece.
La ósmosis inversa constituye el método de la desalinización que hace pasar el agua a través de una membrana, en la cual quedan retenidas las impurezas y la sal.
Pero el proceso tiene sus críticos, pues no se considera una tecnología verde. En realidad, requiere de mucha electricidad para producir agua dulce.