El uso de teléfonos permite difundir la cultura shuar. Archivo / EL COMERCIO
La telefonía celular y el uso de dispositivos móviles inteligentes ha crecido cada vez más en los últimos años.
Y en el caso de Ecuador, las comunidades indígenas autóctonas no son ajenas al fenómeno.
Un ejemplo de esto se ve en una investigación realizada en las comunidades shuar del Ecuador, misma que reposa en los archivos digitales de la Universidad de Santiago de Compostela, realizada por las investigadoras Saleta de Salvador y Yolanda Martínez.
Del artículo publicado por las investigadoras, se desprende que el móvil ha sido un soporte para traducir sus cosmovisiones al lenguaje digital.
Pese a que en algunas zonas amazónicas la cobertura no es total, los habitantes de estas zonas han adaptado estrategias puntuales para poder establecer comunicación de manera adecuada.
Diferentes estrategias de uso
Encargo
El móvil se entrega a alguien que está en una zona de cobertura para que pueda atenderlo.
Viaje
Los usuarios viajan a zonas donde haya cobertura celular, para poder usar el teléfono.
Recados
El envío de mensajes escritos o hablados por medio de amigos completa el uso.
Internet
En cabinas o cibercafés se alquila un computador para poder enviar mensajes por redes.
Uno de los fenómenos que se desprende de esta investigación radica en el hecho de que, mientras que la gente mayor utiliza menos el celular, los más jóvenes han adoptado más rápidamente las nuevas tecnologías.
Algunos de los entrevistados dentro de la indagación aseguran que las nuevas tecnologías permiten que su cultura sea conocida y que se difunda a escala global. Eso, a su vez, permite que haya una mayor divulgación y valoración de sus saberes ancestrales y sus costumbres.
Una de las revelaciones de este trabajo es que, pese a que no existen interfaces de dispositivos tecnológicos que faciliten su uso, el idioma shuar es compatible con el lenguaje digital.
De este modo, los usuarios han podido no solo adaptarse, sino que se han apropiado de las herramientas tecnológicas para difundir su cultura.
Como conclusión, el artículo desvela que la falta de cobertura en la señal telefónica ha derivado en usos particulares, sean propios o adaptados, de los teléfonos celulares de última generación.