El productor Sean Hepburn Ferrer en vísperas de la inauguración de la exhibición sobre sus padres, la actriz británica Audrey Hepburn y el actor y director estadounidense Mel Ferrer, en Bruselas.Foto: AFP
Audrey Hepburn, nacida en la comuna bruselense de Ixelles en 1929, habría cumplido el 4 de mayo 90 años. Con motivo de su natalicio, una exposición sobre la vida de este icono del cine abre sus puertas el miércoles en la capital belga.
La exposición ‘Intimate Audrey’ presenta unas mil fotografías y objetos personales recopilados por uno de sus dos hijos, Sean Hepburn Ferrer, nacido en 1960 de su relación con el productor y actor estadounidense Mel Ferrer.
Más allá de la estrella de Hollywood que recibió con 25 años un Oscar por su papel en ‘Vacaciones en Roma‘, la muestra presenta la mujer, la madre y la embajadora de Unicef en los últimos cinco años de su vida, entre 1988 y 1993.
“En el fondo, no aprendemos nada nuevo, pero cuando llegamos al final, pensamos que la chica de la que el mundo se enamoró (…) floreció en esta mujer. Se puede ver, se puede sentir”, explica su hijo a la AFP .
Este ‘icono’ del glamur “vivió toda su vida en un pequeño vestido de algodón, una vida sencilla” , agrega sobre su madre, a menudo asociada al largo vestido de satén negro, obra de Givenchy, que lució en ‘Desayuno con Diamantes’.
Audrey Hepburn, cuyo verdadero nombre era Audrey Ruston, nació el 4 de mayo de 1929 en Ixelles, de madre neerlandesa y de un padre británico que trabajaba entonces para la filial belga del Banco de Inglaterra.
Entre las cerca de 800 fotos, algunas inéditas, retratos en blanco y negro evocan su entorno: la severidad de la aristocracia holandesa de sus primeros años y sus primeros pasos en Londres, donde, adolescente, sueña con ser bailarina.
Según su hijo, Audrey Hepburn deberá renunciar a ello por falta de una buena forma física, ya que su desarrollo muscular sufrió las privaciones de la Segunda Guerra Mundial, por lo que el cine se impone como “una opción por defecto”.
Dos hijos, dos Oscar
Su encuentro con la novelista francesa Colette durante un rodaje en Monte Carlo es determinante. “Es por supuesto ella quien la lleva a Nueva York. Estamos en 1950-1951”, recuerda el hijo de Hepburn.
Una fotografía de ambas mujeres forma parte del centenar de objetos, dibujos y escritos de la estrella, así como el vestido de su boda con Mel Ferrer, a quien conoció gracias a Gregory Peck, o su pasaporte como embajadora de la ONU.
Este trabajo como embajadora de buena voluntad con menores víctimas del conflicto en Somalía le valió otro scar en 1993, año en el que fallece en su casa en Suiza a los 63 años a causa de un cáncer.
La estatuilla “ humanitaria ” a título póstumo que se le entregó a Sean es otra de las atracciones de la visita. El primer Oscar se encuentra en posesión de su segundo hijo y hermanastro de Sean, Luca Dotti.
“Somos dos, había dos Oscars, cada uno de nosotros tiene uno sobre su chimenea”, dice con una sonrisa el hijo mayor.
La exposición, situada no muy lejos de la turística Grand Place de Bruselas y cuyos beneficios se destinarán a la lucha contra las enfermedades raras y el cáncer, estará abierta hasta el 25 de agosto.
Su encuentro con la novelista francesa Colette durante un rodaje en Monte Carlo es determinante. “Es por supuesto ella quien la lleva a Nueva York. Estamos en 1950-1951” , recuerda el hijo de Hepburn.
Una fotografía de ambas mujeres forma parte del centenar de objetos, dibujos y escritos de la estrella, así como el vestido de su boda con Mel Ferrer, a quien conoció gracias a Gregory Peck, o su pasaporte como embajadora de la ONU.
Este trabajo como embajadora de buena voluntad con menores víctimas del conflicto en Somalía le valió otro Oscar en 1993, año en el que fallece en su casa en Suiza a los 63 años a causa de un cáncer.
La estatuilla “humanitaria” a título póstumo que se le entregó a Sean es otra de las atracciones de la visita. El primer Oscar se encuentra en posesión de su segundo hijo y hermanastro de Sean, Luca Dotti.
“Somos dos, había dos Oscars, cada uno de nosotros tiene uno sobre su chimenea”, dice con una sonrisa el hijo mayor.
La exposición, situada no muy lejos de la turística Grand Place de Bruselas y cuyos beneficios se destinarán a la lucha contra las enfermedades raras y el cáncer, estará abierta hasta el 25 de agosto.