La obra se presentó el sábado 12 y tendrá una segunda función este domingo 13, a las 12:00, en el Teatro Variedades. Foto: Eduardo Terán/EL COMERCIO
Un hombre malhablado, un dramaturgo fracasado, un joven que no sabe leer de corrido y un albino se unen para crear una obra de teatro que resulta ser un fiasco.
Con un relato lleno de humor negro y un discurso sobre la esperanza, estos cuatro sujetos resaltan el valor de la amistad en la obra ‘Más pequeños que el Guggenheim’, que se estrenó la noche de este sábado 12 de septiembre y tendrá otra función este lunes 14, a las 12:00, en el Teatro Variedades Ernesto Albán. La entrada costará USD 10.
Presentada por el colectivo Los Guggenheim de México, esta puesta en escena genera una reflexión sobre el fracaso desde la comedia hilarante. Los cuatro personajes en escena tienen una vida que no esperaban.
El albino, conocido como Al, es un huérfano que enterró a todos sus hermanos y lo único que quiere es un papel en la obra de teatro que está montando Gorka, un dramaturgo cachudo que no logra escribir el final de la historia. Improvisa el papel de Al como árbol, como operador de una motocicleta o como cualquier papel secundario que termina por arruinar su trabajo.
Acompañado por el gritón y malhablado Sunday, Gorka quiere escribir sobre las aventuras que vivieron juntos cuando viajaron a España, pero no logra plasmar en su texto todo lo que sucedió en realidad. Contratan a un no-actor llamado Jamblet, que presume de tener un nombre teatral –aunque mal escrito-. Es un cajero de un restaurante de comida rápida que no sabe leer bien, que no conoce de geografía y que no es muy brillante.
Juntos revelan sus secretos, se martirizan por el desempleo, por la desesperación de su propia soledad y por sus constantes fracasos, con un tono satírico y capaz de provocar carcajadas en el público.Se muestran como tipos insignificantes.
Con una escenografía simple, basada en una mesa de café, dos sillas y una banca de madera, estos personajes pretenden estar en consultorios médicos, en hospitales, en la cárcel, manejando una motocicleta y hasta viendo desnudistas en un prostíbulo con la ayuda de luces fluorescentes y música de fondo.
Alejandro Ricaño es el director de la pieza teatral que en el 2008 recibió el premio Emilio Carbadillo por su trabajo hilarante y conmovedor. Los actores en escena son Adrián Vásquez (Sunday), Austin Morgan (Gorka), Hamlet Ramírez (Jamblet) y Miguel Corral (Al).