Unos 1 600 millones de personas en el mundo dependen directamente de los bienes y servicios que los bosques proveen para su subsistencia. Por ello, grupos ambientalistas impulsan actividades para conservarlos. En el Ecuador está vigente el Programa de incentivos para la reforestación con fines comerciales.
Esta iniciativa tiene como objetivo volver a plantar en 120 000 hectáreas hasta 2017.
El Programa entrega, a personas naturales y jurídicas, incentivos económicos, equivalentes hasta el 75% del costo del establecimiento, y del costo de mantenimiento de la plantación durante los primeros cuatro años.
Pero también se han emprendido acciones para evitar la tala de árboles. En septiembre del año pasado, por ejemplo, se decretó estado de excepción en Esmeraldas.
Los bosques son ecosistemas que albergan el 80% de la biodiversidad del planeta, son proveedores de agua, alimentos y materias primas.
El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, en un mensaje destaca que la masa forestal supone un tercio del total de la superficie terrestre. Muchas personas en el mundo dependen de bosques para obtener “combustible, cobijo e ingresos”, por lo que es necesario trabajar en su protección.