‘Los mecanizados (recibos) del retroactivo de las pensiones jubilares se entregarán desde el 10 diciembre”. Este anuncio está en el ingreso a la matriz del IESS, en Quito, en un letrero hecho a mano.
Elsa Mogrovejo, de 68 años, esperará a que le entreguen ese documento para verificar si el monto que recibió, por la última alza de pensiones, es el adecuado. Esta semana, decenas de adultos mayores aseguraron que no se cumplió con el pago que fue aprobado por el Gobierno.Mogrovejo, por ejemplo, recibió USD 486,15 de retroactivo desde enero, pero esperaba tener 71,17 más, de acuerdo con lo que se estableció en la tabla de pagos de la reforma a la Ley de Seguridad Social. Este último monto, según el IESS, ya se le entregó desde enero pasado en cuotas mensuales. Ese fue el incremento que la jubilada recibió por al alza aprobada en marzo de 2009 y que equivalía a la inflación del año pasado del 4,31%.
Sin embargo, a Mogrovejo como al resto de jubilados les tomó por sorpresa que el IESS tomará en cuenta el alza anterior para el pago del último incremento.
Sobre todo porque no consta en la reforma aprobada. La legisladora Nivea Vélez, presidenta de la Comisión de los Derechos de los Trabajadores, recordó que en la transitoria primera se establece que para este año, “por única vez” el incremento será de entre USD 40 y 60, “sin especificar ningún descuento (alza anterior)”.
Solo en los casos del pago de pensiones de montepío por viudedad y por orfandad se menciona que se tomará en cuenta “el incremento que se recibió a partir de enero del 2010.
Según Vélez, “se interpreta mal la Ley al descontar el incremento que tuvieron a inicios del año. En algunos casos se les retuvo hasta USD 110”. Por ello, el 30 de noviembre pasado, la asambleísta envió un oficio al presidente del Consejo Directivo del IESS, Ramiro González, para que rinda cuentas de los pagos.
En ese oficio se da un plazo de 15 días al IESS para que remita la información ante la Comisión. Según la reforma a la Ley de Seguridad Social, “la falta de transparencia de los recursos para el pago de pensiones será sancionado con la destitución de la autoridad y de las servidoras y servidores públicos remisos de su obligación”. En el IESS se aseguró que los pagos se cumplieron conforme a lo establecido en la Ley y que el costo total del incremento del 2010 fue de USD 123 millones. De esto, USD 72 millones corresponden al último aumento y el resto al incremento pagado desde enero de este año.
Segundo Bolagay, presidente de la Asociación de Jubilados Manuel Agustín Aguirre, cree que estas últimas protestas son el resultado de la falta de información. “Uno siempre espera que le den más dinero para vivir y eso es normal, pero también hay que ser conscientes de que lo que hemos conseguido es un triunfo”.
Elsa Carrera, de 68 años, coincide con esto. Ella cree que fue una de las más beneficiadas, porque se aplicó el principio de pagar más dinero a los que tenían las pensiones más bajas. Ella cobraba USD 120 como pensión hasta octubre, pero desde este mes subió a USD 180. “La gente no se conforma con nada”.
Ayer, la Federación de Jubilados de Pichincha, se reunió en la mañana y decidieron esperar a que el IESS remita la información pedida por Vélez para adoptar una posición oficial.