Poca inclusión laboral de los afro en Santo Domingo

Cayetano Tenorio (centro) lideró la veeduría sobre el acceso laboral en la provincia

Cayetano Tenorio (centro) lideró la veeduría sobre el acceso laboral en la provincia

Cayetano Tenorio (centro) lideró la veeduría sobre el acceso laboral en la provincia. Foto: Bolívar velasco/El Comercio

Los resultados de un sondeo sobre la inclusión de los afrodescendientes en los espacios laborales de instituciones públicas se analizan en Santo Domingo de los Tsáchilas.

La veeduría que desarrolló este trabajo, durante cuatro meses, concluyó en que los afros tienen pocos espacios de trabajo en las 60 entidades estatales que hay en la provincia.

Se verificó que hay un promedio de dos a tres afrodescendientes en cinco organismos, según el titular de la veeduría Cayetano Tenorio.

Los puestos que ocupan van desde los servicios de guardianía, cuidados de parques y secretarías administrativas. Tenorio indica que con estos resultados se concluye que no se cumple el Decreto Ejecutivo 60, vigente desde el 2009.

En el artículo 3 de este documento se habla de la necesidad de adoptar “una política laboral de acciones afirmativas para sectores sociales históricamente discriminados”.

El acápite agrega que en todas las instancias del Estado se procurará el acceso laboral de afroecuatorianos, indígenas y montuvios, en un porcentaje no menor a la proporción de su población.

Esto es el 7,2% de la población afro en el Ecuador que, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), es de 1 042 812. En la provincia de los Tsáchilas son 47 000 personas.

La veeduría, avalada por el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social, desplegó su trabajo con base en un análisis de la Defensoría del Pueblo.

La entidad estableció que el 9,03% de los afros a escala nacional se dedican a actividades domésticas y artesanales; el 7,83% a servicios y ventas; el 6,69% está vinculado a las FF.AA. y el 2,70% cumple funciones en direcciones y gerencias. También se indica que el 3,59% (37 436 personas) trabajan para el Estado.

Una de las instituciones analizada por la veeduría fue el Municipio de Santo Domingo. De los 2 800 empleados del Cabildo, apenas dos son secretarias afrodescendientes.

Otras cinco personas son guardias de seguridad y cuidan parques o jardines. En la Dirección del Ministerio de Cultura se identificó a una persona afrodescendiente, en la Prefectura, siete; y en el Banco de Fomento, dos.

Leonela Quiñónez, dirigente afro, asegura que una de las necesidades de su pueblo es acceder a plazas de trabajo, ya que el 11% está desempleado.

La Asociación de Afrodescendientes Mayoritarios del Ecuador (AMAE), ubicada en Santo Domingo de losTsáchilas, sigue de cerca a la veeduría.

Ellos no descartan que detrás de estos indicadores hay una percepción de exclusión que marginaría a los afros del campo laboral. El dirigente Javier Marques asegura que tienen proyectos de más oportunidades de empleo.

La iniciativa consiste en la implementación de un paradero turístico en el km 1 de la vía Quinindé – Esmeraldas. Allí se planea dar trabajo a los pobladores de la comunidad afro de la zona. También, se prevé la creación de microempresas de fabricación de bloques y artesanías, además de brindar servicios de alimentación.

“Nuestra gente tiene que superar ese estigma de ser el empleado, cuando puede ser su propio jefe”, dice Marques.

Los afros en Santo Domingo se constituyeron en migrantes en la década de los noventa cuando se asentaron en sectores urbanos periféricos.

Viven en asentamientos como El Ébano y El Paraíso; las cooperativas Santa Martha, Cristo Vive, Plan de Vivienda...
Las conclusiones de la veeduría se entregarán a las instituciones evaluadas.

La Gobernación se encargará de que los documentos sirvan para el análisis para la contratación que supervisa el Ministerio de Relaciones Laborales, dijo la gobernadora Doris Merino.

Ella añadió que hay un principio de meritocracia por el que todo ciudadano debe pasar para aspirar a una vacante.

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