Poco a poco, el globo comenzó a adentrarse en la estratósfera. A medida que las nubes se veían más alejadas, el objeto se adentró en la capa de ozono. Foto: Captura
Al colombiano Faber Burgos Sarmiento se le ocurrió una brillante idea: fabricar un globo meteorológico con 1 811 litros de helio. Le puso una cámara GoPro y el resultado fue algo espectacular.
“Hoy haré el experimento más loco que jamás hice“, dice en el video el influencer que sube contenidos sobre ciencia en sus redes sociales. “Diseñamos una sonda, la cual llevaría una GoPro dentro. Esto lo atamos al globo más grande que quizás hayamos visto en nuestras vidas”.
Para hacer el despegue, Burgos debió conseguir un permiso de Aeronáutica Civil en su país. El lanzamiento se hizo en el municipio de Cuítiva, en Boyacá, centro-norte de Colombia.
“Me vine aquí, a 3 079 metros sobre el nivel del mar porque el día de hoy vamos a hacer algo impresionante. Vamos a lanzar un globo tan alto que muy probablemente -quizás en el país- no se había visto muchas veces”, asegura Burgos.
El globo comenzó a elevarse y mostró las montañas de Boyacá en un comienzo, así como la laguna de Tota. Después, el globo pasó las nubes y cada vez se fue elevando más.
Mientras más altura empezó a ganar, empezó a atravesar la tropósfera, “la capa atmosférica donde ocurren todos los fenómenos climáticos del planeta y, por lo general, donde vuelan los aviones comerciales”. A esta altura, ya habían rebasado la del monte Everest.
Poco a poco, el globo comenzó a adentrarse en la estratósfera. A medida que las nubes se veían más alejadas, el objeto se adentró en la capa de ozono. “Nuestro globo ya alcanzaba sus límites, pero a lo lejos ya alcanzaba a divisarse la curvatura del planeta“. El sol y la luna se observaban claramente en el registro de la cámara.
Una vez en este punto, el globo reventó y su carga empezó a descender. Cayó a unos pocos kilómetros desde donde fue lanzado y pudo ser localizado por Burgos mediante un GPS.