Más allá del sistema eléctrico, en uno de los puntos en los que se debe poner atención es en las pantallas en las cuales se verán las imágenes. Foto: AFP
Teclados, consolas, ventiladores, equipos de amplificación, accesorios, cables, televisores, computadoras… El listado de dispositivos es tan extenso que ahora ser un ‘gamer’ aficionado ya no es una cuestión que se reduce a unos pocos metros cuadrados sino que necesita de ambientes que cumplan con las especificaciones técnicas de la vida de quienes se apasionan por los videojuegos.
El incremento de los jugadores en el país, según lo revelan las últimas encuestas realizadas por Ecuagamers, empieza a mover las tiendas especializadas, cuya función principal
es dotar de los elementos necesarios para crear estos espacios.
Nelson Tapia, especialista en esta área, comenta que ahora los ‘gamers’ ya no solo piden determinados tipos de consolas, tarjetas de memorias o controles. También se ha vuelto popular, a su criterio, la adecuación de sistemas de sonido envolventes, muchos de estos pensados para dar forma a objetos 3D gracias a la ubicación de parlantes en los ejes X,Y y Z (suelo, paredes y tumbados).
Si se busca una medida estándar, Armando Chávez -experto colombiano en videojuegos- recomienda partir de una habitación típica de una casa, algo que mida 3×3 metros. Uno de los primeros requerimientos en la actualidad es trabajar con un sistema eléctrico de 220V ya que, según lo mira, el cambio de voltaje en el que viene trabajando el Estado, debido a sus planes energéticos, también tendrá un impacto directo en el ámbito de los videojuegos.
Él cree que por ello es mejor, desde ya, empezar por la renovación en esta cuestión, tomando en cuenta que eso implica un cambio en los adaptadores de los aparatos con el fin de que estos no se quemen.
En cambio, Juan Carlos Andrade, diseñador y programador multimedia, sostiene que la idea de los 220V es aún muy apresurada en el contexto ecuatoriano. “Muchas tiendas ni siquiera venden adaptadores para utilizar consolas japonesas en el país”, comenta.
Más allá del sistema eléctrico, en uno de los puntos en los que se debe poner atención es en las pantallas en las cuales se verán las imágenes.
Paola Navarrete, ingeniera electromecánica y ‘gamer’ adicta a los productos de Nintendo (como ella misma se define), afirma que es preferible tener por lo menos dos pantallas para jugar.
Con eso se amplia no solo el horizonte de los juegos sino que, como ella suele hacerlo, una de estas se mantiene conectada a la consola y otra a una computadora a través de la cual puede hacer consultas rápidas sobre estrategias y jugadas. En el mejor de los casos, recomienda que sean de 32 pulgadas a una distancia no menor a 120 cm para una óptima visualización de los gráficos.
Tapia, quien juega en consolas Xbox y PlayStation, sugiere tomar en cuenta un aspecto esencial en el diseño de un espacio para ‘gamers’: los anaqueles. Amplios y de varias repisas son las condiciones que él mira como necesarias para guardar y clasificar los videojuegos.
Para los padres poco experimentados en este ámbito, Navarrete recomienda que se haga una inversión en los controladores de las distintas consolas.
En el caso de Wii, su preferido, las opciones son adquirir las pistolas y los volantes, dos elementos indispensables para vivir la experiencia de los juegos desarrollados para Nintendo. Estos, dentro del diseño de una habitación estándar para ‘gamers’, no deberían estar a más de 2,5 metros de donde se ubican las consolas.
En toda esta suma de visiones en torno al espacio ideal para los jugadores, Tapia se encamina hacia la inversión del Kinect, un controlador de juego que, a diferencia de los tradicionales, no requiere de contacto físico ni con la consola, ni con aparato alguno de los Xbox. Para él, esta es la mejor opción dentro de una habitación de ‘gamers’, ya que economiza espacio y, además, permite ahorrar pues no es necesario comprar pedales, volantes, guitarras, cañas de pescar, entre otras opciones en el mercado.
Hay una última recomendación en la adecuación de estos lugares según la mirada de los expertos: la adquisición de sillas para ‘gamers’. A diferencia de las comunes, estas pueden incluir parlantes, sistemas de vibración y otras características que enriquecen la experiencia del videojuego.