El ratón de campo y el ratón de la corte es uno de los cuentos favoritos de Doménica Utreras, Jail Aro, Brenda Romoleroux y Marco Segovia, todos de cuatro años. Y es una de las herramientas que Mariana Acosta, pedagoga del Centro Bilingue Spring Light, en el norte de Quito, usa para reforzar su memoria. Mientras ella lee cambia el tono de voz de acuerdo con la circunstancia y de inmediato capta la atención de los pequeños.
Luego de 20 minutos, Acosta les hace preguntas sobre la fábula. Los niños recuerdan cada detalle. “¿Cuántos ratones habían en el cuento?, al unísono responden dos. “¿Qué comieron cuando estaban en el castillo?” Mucho queso dicen en coro.
Las actividades lúdicas mejoran la memoria y la concentración en los niños. Acosta explica que el desarrollo más significativo de la atención, concentración y memoria se da en la etapa preescolar. “A partir de los 6 años se utiliza lo que se desarrolló en la primera infancia”, afirma.
Por esta causa es recomendable que el refuerzo de las capacidades mentales empiece en edades tempranas. Lo aconsejable es empezar desde los cuatro años. En casa hay que dedicarles por lo menos 40 minutos al día.
Las técnicas y ejercicios deben ser seleccionados de acuerdo con la edad del niño. Leonor Berrezueta, directora del Centro Internacional Aletheia, indica que para infantes, entre 4 y 5 años se utilizan las historias cortas, cuentos, material didáctico, audiovisual, pintura y dibujo. Aquí priman los conocimientos básicos como las figuras, colores, días de la semana, ubicación en el tiempo (mañana, tarde o noche).
Entre los 6 y 7 años se desarrollan las nociones numéricas, el aprendizaje del abecedario, las vocales, consonantes y el reconocimiento de los colores y texturas.
Desde los 8 años en adelante es la fase de la agilidad mental. Se aconseja las lecturas y ejercicios que solidifiquen las operaciones matemáticas. También los sudokus, crucigramas y laberintos. Ambas especialistas advierten que si el niño no refuerza su memoria, tendrá problemas en el aprendizaje. Los ejercicios mejoran el 80% de la concentración y memoria, señala Acosta.
Estas técnicas mejoran la autoestima y el estado anímico.
De 4 a 5 años
A través del juego enseñe conocimientos
Los videos. Durante 20 minutos los infantes deben ver un video o película acorde con su edad. Luego haga preguntas o que ellos cuenten qué es lo que vieron, en otros 20 minutos. Recordar lo visto ayuda a la memoria.
El material audiovisual. Busque asesoría de especialistas o pedagogos sobre las películas o videos que son recomendados para niños. Evite aquellas que no contengan un lenguaje sencillo y claro para sus edades.
Los cuentos. Durante la lectura los infantes deben mantener la atención. Para ayudarles a recordar se aconseja actividades extras como dibujar a los personajes, hacer representaciones de las escenas que más les llamó la atención.
Los colores. Dedique una semana a actividades con cada color. Por ejemplo, usar papel brillante y pegarlo en hojas formando figuras básicas como el cuadrado, triángulo y círculo. Se puede complementar esta tarea con juegos.
El vocabulario. Para el reconocimiento de los días de la semana y la ubicación en el tiempo escoja palabras que los niños puedan asociar. Como trabajo, descanso, día y noche.
Haga que los niños construyan historias.
Intercalar las actividades. Recuerde que los niños pequeños suelen cansarse con facilidad. Alterne los ejercicios, cada uno aplíquelos una vez a la semana para no aburrirles y generar interés.El juego es la mejor técnica.
De 6 a 7 años
Refuerce y repase lo aprendido en la clase
Las nociones numéricas. En esta etapa el niño debe desarrollar el sentido de cantidad y número. Si se habla del número tres, el niño puede identificar tres cosas. Trabaje con fideos, lápices, pinturas, hojas, o cualquier objeto.
El abecedario. Un juego es la sopa de letras. En un cuadro ponga vocales y consonantes. Luego pida que el niño encierre en un círculo y con determinado color una vocal o alguna consonante. Esto le ayudará a reconocer.
Las lecturas .
Desde esta edad fomente el hábito de la lectura. Empiece con textos que contengan palabras sencillas, según el nivel de estudio del niño. Por ejemplo si aprendió la letra P, busque lecturas con palabras con P.
Los nombres. Un juego para la memoria es recordar diferentes nombres de las personas. En el proceso identifique las características distintivas del rostro, así como también las físicas (color de cabello, estatura, peso, etc.).
La guía del plantel educativo. Antes de elegir una actividad o ejercicio guíese por la planificación del maestro del niño. Si en la semana se le va a dedicar a los números o a ciertas vocales, en casa refuerce este aprendizaje.
Las canciones. Son buenas herramientas para recordar. Los niños asocian las letras de las canciones con lo que aprenden en la escuela. Busque temas que hablen de los números, el abecedario, los colores y animales, etc.
De 8 años en adelante
Potencie la a agilidad mental
Las lecturas analíticas. Primero debe escoger un libro que sea de preferencia de los niños.Pueden ser de animales, plantas, carros, etc. No de una materia específica. Luego haga ejercicios en los que analicen lo que escucharon.
Los libros enriquecen el vocabulario. Para fomentar la lectura y que conozcan nuevas palabras, enseñe a leer libros de su interés.Recuerde que el lenguaje de las tiras cómicas es muy pobre.La lectura no tiene que ser impositiva.
La ortografía. Por lo menos dos veces a la semana refuerce la gramática y la ortografía. Un ejercicio es el dictado de palabras y oraciones. Escoja unas 10. El estudiante deberá reconocer con qué reglas ortográficas se trabaja.
Las operaciones matemáticas. En esta edad se solidifica las suma, resta, división y multiplicación.
Procure un repaso diario de las tablas de multiplicar. Para hacerlo más ameno utilice ejercicios prácticos como las compras.
Los ejercicios matemáticos. Formule problemas en los que se utilice las cuatro operaciones básicas. Plantee situaciones en las que se use una, luego dos y cuatro operaciones. Ponga un límite de tiempo para cada ejercicio.
Los ejercicios.
El sudokos, laberintos, rompecabezas o crucigramas son válidos para fomentar la agilidad mental y el cálculo. Busque material de acuerdo con la edad. También establezca un tiempo una vez a la semana.
Ocho consejos
Establezca una rutina. Los ejercicios para la memoria deberán realizarse siempre después de las tareas escolares y a una hora fija. No imponer como un castigo, al contrario motivar para que sea un hábito.
Ser disciplinados. Inculcar en los niños a que se dediquen a una sola actividad a la vez, luego de que la terminen podrán iniciar otra. No es recomendable saturarle de repasos o ejercicios. Escoger un día para lecturas, otro para matemáticas, etc.
El lugar debe ser fijo. Preferir un escritorio o una mesa. Nunca en la cama. Vigilar que haya buena iluminación, prefiera cerca de una ventana. Evite los objetos que causen distracción, como juguetes o exceso de materiales didácticos.
El descanso. Antes de iniciar los repasos o ejercicios se puede tomar un descanso entre 5 y 10 minutos. Pero que este tiempo no se le dedique a la televisión, porque será difícil desprender al niño y lograr una concentración.
Los juguetes. Estos objetos también pueden servir para la enseñanza. Busque aquellos como los legos, rompecabezas o aquellos que enseñan las partes del cuerpo, países, animales, etc. Pero limite su uso, guíeles en el juego.
Las enciclopedias didácticas y diccionarios. Fomente en el niño el uso permanente de estas herramientas. Pregunte el concepto de alguna palabra y promueva que utilice un diccionario. Además de enriquecer su vocabulario, conocerá las definiciones de cada palabra. Este hábito se quedará en el estudiante hasta su vida adulta.
¿Dónde acudir?
Centro Internacional Aletheia . Antes de iniciar con el programa el estudiante se somete a una evaluación académica. Dirección: avenida República E5- 45 e Inglaterra. Contactos: 292 3043.
Centro Bilingüe Spring Light. Brinda enseñanza a niños menores de cinco años. Dirección: José Arteta N70-23 y Machala. Teléfono 2490727.
Cetro Educativo Sin Fronteras. Se especializa en problemas de aprendizaje. Dirección: Las Azucenas y 17 de Septiembre. Teléfonos 2 830518.
Centro de Terapia Integral Paceine. Ofrece terapias en lenguaje y psicopedagogía. Dirección: De los Fresnos E13- 54 y Guayacanes. Contactos al teléfono 241 2233 y al celular 099 664667.
