Con un terno de tonalidad rosa claro apareció el cantante argentino Fito Páez a las 20:00 de este jueves 29 de mayo del 2014, en el coliseo Jefferson Pérez de Cuenca.
Los 4 000 asistentes no dejaban de aplaudir mientras Páez abrió su concierto con el tema ‘Yo te amo’, que es el nombre de su último disco y de su tour.
Páez, de 51 años, dijo buenas noches Cuenca y empezó a entonar su piano blanco que estaba decorado con una cinta rosa, que hacía juego con su look. Luego cantó ‘Margarita’, un tema dedicado a su hija y apareció un video.
Lorena Suquilanda fue una de las asistentes. Ella no dejaba de tomar fotos y de grabar el concierto. Otros de los presentes fue el poeta Sebastián Lazo y el historiador Alfredo Martínez, quienes no dejaban de tararear temas como ‘Perdón’, que fue la tercera melodía.
“Buenas noches Cuenca venimos de muy lejos y es la primera vez y gustosos de estar aquí”, repitió el argentino. Los aplausos no cesaban en el coliseo, mientras el cantante tomaba su guitarra y empezó a interpretar ‘Ojalá sea amor’. Este fue uno de los temas que muy pocos de los asistentes se sabían.
El ganador de cinco premios Grammy hizo una pausa y se refirió con respeto a los soldados que han perdieron sus vidas. Unas imágenes de Páez vestido de soldado aparecieron el momento que cantó ‘La canción del soldado y Rosita Pazos’.
Con este tema se sintió identificado el guayaquileño Gabriel Romero, quien dijo que Páez es un artista que aborda problemas sociales con sus letras y no tiene reparos en decir las cosas y por eso le gusta sus canciones.
El cantante nuevamente hizo una pequeña pausa y dijo que está promocionando su último disco porque no todas las radios pasan todavía mis temas, “pero también cantaré temas de los inicios de mi carrera”.
La euforia no paraba por parte del público y de Páez. Esto hizo que permanente interactúe y realice un preámbulo a cada uno de sus temas.
El momento romántico llegó cuando dijo tuve una novia especial y para ella compuse ‘Everest’. Otro de sus temas de amor fue ‘Nadie como ella’, que es una melodía en la que cuenta la historia de dos jóvenes que empiezan en las drogas.