Los estudiantes de los centros educativos de Saraguro participaron en el pregón cultural, que finalizó en el centro. Foto: Lineida Castillo / El Comercio
Los indígenas ecuatorianos celebran el Pawkar Raymi, que es la primera fiesta del calendario andino. Esta celebración representa la época del florecimiento e inicio de las cosechas de los frutos.
El 21 de marzo es el día principal del Pawkar Raymi en la cosmovisión indígena. Pero algunas comunidades como Gunudel y Gulacpamba, pertenecientes al cantón lojano de Saraguro, empezaron los festejos antes y se extenderán durante tres semanas.
La celebración se inició el pasado 10 de este mes con el pregón, que se cumplió en el centro de Saraguro. Participaron las unidades educativas como Inti Samana e Inti Raymi. Hubo trajes típicos y danzas.
Entre el 1 y el 14 de este mes también se cumplieron baños de purificación a las autoridades del Consejo Directivo Kapak, síndicos y mayorales. Además, el sábado pasado se realizó una minga comunitaria y ayer se cumplió la fiesta de integración con una comida comunitaria.
En la noche de ayer se tenía prevista la elección de la Ñusta Pawkar Raymi. Entre las aspirantes estuvieron Martha Cabrera, Sisa Quizhpe y Samy Puchaicela. El evento cultural busca rescatar las costumbres y tradiciones vinculadas con esta celebración.
Las participantes elaboraron atuendos típicos con accesorios como semillas naturales. Además, prepararon alimentos como cuy y chicha de jora para compartir y danzas folclóricas y música andina.
El evento más importante del Pawkar Raymi será mañana, a las 04:00. A esa hora se cumplirá un baño de purificación a las autoridades del Cabildo y a las 10:00 habrá una caminata de las comunidades, organizaciones sociales, centros educativos desde Gunudel hasta la plaza central de la urbe de Saraguro.
Para esa ocasión, los participantes visten con elegancia sus atuendos típicos y las autoridades del Cabildo llevan los cuatro elementos de la naturaleza como el fuego, el agua, el aire y la tierra, contó el indígena Luis González.
La música andina entonada por los presentes con rondador, tambor, rondín y pingullo sonará todo el tiempo. Con ese ritual, los líderes comunitarios dan paso a que las familias prueben las primeras cosechas de choclos, arvejas y habas.
También, dijo González, se dará inicio a otras actividades tradicionales de los saraguros como la supalata. Esta costumbre consiste en compartir entre las familias, las semillas de los granos que han caído en las huertas. Es un ritual de gratitud a la Madre Tierra.
Esta práctica se vive desde las primeras cosechas y se cumplirá hasta el Domingo de Ramos, con la denominada Mama Supalata. Esta costumbre está representada por una mujer que camina acompañada de disfrazados y músicos. Visita varias casas y sus propietarios le ofrecen tamales, colada de sambo, semillas y otros alimentos.